Si
entendemos el poder en términos de concentración de riqueza y de poder, esto sí
está ocurriendo. El poder se concentra siempre más en manos de algunas
multinacionales ligadas de manera fuerte a centros financieros. Algunos dicen
que hay un capitalismo malo que sería el financiero, y por otro lado estaría el
capitalismo productivo que sería el bueno. Esto es una locura porque la parte
financiera, el banco, el fondo monetario, toda la sociedad financiera son parte
integral del mismo sistema. Las finanzas no crean riqueza social, sino una
burbuja especulativa que tiende a explotar. No pueden ser las finanzas la
solución al problema de esta crisis sistémica.
“LAS FINANZAS NO CREAN RIQUEZA SOCIAL. NO PUEDEN SER LAS
FINANZAS LA SOLUCIÓN AL PROBLEMA DE ESTA CRISIS SISTÉMICA”
Entrevista a Luciano Vasapollo y Rita Martufi
El pasado mayo Luciano Vasapollo y Rita Martufi, compañeros de la USB
(Unione Sindicale di Base) de Italia y miembros del Centro de Estudios CESTES,
visitaron Euskal Herria a invitación de LAB y la Fundación Ipar Hegoa.Durante
la visita la Fundación Ipar Hegoa tuvo la ocasión de charlar con ellos sobre
temas como el imperialismo del siglo XXI, las principales caracteristicas de la
crisis y su alternativa, los cambios en América latina o la necesidad de un
estado para Euskal Herria.
Vasapollo y Martufi participaron en diferentes actos organizados por Ipar
Hegoa y mantuvieron diferentes reuniones con diferentes mienbros de LAB para
compartir las realidades políticas, económicas y sociales de Italia y Euskal
Herria. Martufi participó en el coloquio sobre la soberanía alimetaria y el
sindikalismo de clase que se celebró en Durango. Vasapollo a su vez, y junto al
sociólogo y escritor estadounidense, James Petras, ofrecio dos conferencias
donde se analizó la crisis del capitalismo y el imperialismo en europa y en el
mundo.
¿Cómo definiríais el imperialismo del siglo XXI?
¿Cómo ha evolucionado?
Luciano Vasapollo. La cuestión del imperialismo es una cuestión
compleja ligada al método de producción capitalista. El siglo XXI, está
caracterizado por una fuerte competencia global inter-imperialista, donde tiene
un rol central el imperialismo de EEUU, pero en la que se ha reforzado el
imperialismo europeo. Este imperialismo europeo tiene hoy para nosotros un
fuerte impacto. Según nuestro análisis, la construcción de la UE monetaria, es
la construcción de un pueblo imperialista de competencia global, económica,
comercial y monetaria donde el euro tiene la configuración de una moneda fuerte
que representa la fuerza económica alemana.
Hoy Alemania esta imponiendo a toda Europa su modelo exportador y el euro
se puede considerar como un super marco, al igual que se puede considerar la UE
monetaria como una súper Alemania. Una forma de imperialismo y neo colonialismo
de interior, que ha encauzado a la desindustrialización a los países del área
sur, llamados el PIGE (Portugal, Italia, Grecia y España), obligándoles a ser
países importadores con una fuerte deuda.Todo esto para permitir las
exportaciones de Alemania, para que esta pueda luego comprar la deuda de estos
paises y configurar una comisión de competencia global con el área del oriente
(Japón) y EEUU. Para mantener esta competencia global y reforzarse necesita
tener toda la parte restante de Europa bajo una forma de neo colonialismo. Esto
que explica la masacre social que esta llevando a cabo la troika.
Con el fin de acumular cada vez más poder no han
dudado en utilizar todas la armas que tenían a su alcance. Las guerras por
ejemplo han sido y son utilizadas para saquear la riqueza de otros países.
¿Estamos ante un riesgo real?
Rita Martufi. Podemos decir que la crisis económica del 29
terminó con una Guerra Mundial. El sistema capitalista utiliza todos los
métodos a su alcance para resolver la crisis. Pienso que esta crisis es del
sistema, es la crisis del modelo capitalista y no tienen todavía el modo de
resolverla.
Tenemos que decir que desde el final de la Segunda Guerra hasta hoy, hay
muchísimas guerras en todo el mundo. No es necesario llegar a una guerra
mundial para decir que estamos en situación de guerra, basta con ver todos los
ataques que está llevando a cabo el imperialismo de EEUU. Pero no solamente
ellos, también el imperialismo Europeo está atacando los países que no se
someten a sus ideas. Están las guerras de Libia, Afganistán, Irak…, que las
califican como “misiones de paz”.
Italia también es uno de los países que siempre esta en primer plano para
ir a la guerra. El nuevo Gobierno de Italia, por ejemplo, dice que nuestro
gobierno tiene que estar todavía presente en todas las “misiones de paz”, que
como he dicho antes, no son más que guerras camufladas. La constitución
Italiana dice que está en contra de la guerra excepto en caso de ser atacados,
pero estas son guerras contra los pueblos y contra la autodeterminación de los
pueblos. Dicen que en America Latina hay dictaduras. Todo depende de que lado
se mira el mundo.
L. Cada vez que hay una crisis profunda el capital
sale de ésta a través de una guerra. Cuando terminó el imperio Inglés todo se
resolvió con la Primera Guerra Mundial. La crisis del 29 no se resolvió con el
keynesianismo o con el fordismo, se resolvió con la Segunda Guerra Mundial, de
donde nació un nuevo imperio, EEUU. Un imperio que a partir de ese momento
determinará toda la política económica comercial y militar mundial. La Segunda
Guerra Mundial está también en la raíz de la UE.
Cuando se habla de guerra no se habla solo de la guerra militar. Hoy la
guerra militar existe aunque no sea mundial. El periodo desde la segunda guerra
hasta hoy, ha sido el periodo de mayor conflicto local armado. ¿Pero cómo se
llama esta crisis que masacra jóvenes, inmigrantes, precariza el mundo del
trabajo?: La guerra económica. Este es un sistema que se sostiene, se refuerza,
sólo y exclusivamente con la guerra.
Se puede decir que nuestra sociedad del bienestar
se basa en la pobreza de otros.
R. Si. La riqueza se acumula en manos de algunos pocos porque mucha otra
gente vive en la miseria. No tienen seguridad social, no tienen seguridad de
trabajo. Los jóvenes por ejemplo no tienen futuro, esta será la primera
generación que vivirá peor que sus padres. Yo estoy mejor que mi padre y mi
madre, pero mis hijas, aunque hayan terminado sus estudios, no tienen un empleo
seguro.
L. Esto es cierto, y no solo en periodo de crisis, también en el periodo
de expansión y de crecimiento del capital. El capitalismo se caracteriza por un
consumismo fuerte y la crisis se caracteriza por una sobre acumulación,
sobreproducción. Mis estudiantes me preguntan porqué se habla de crisis de
sobreproducción, cuando 4mil millones de personas sufren hambre, cuando 4mil
millones de personas no tienen infraestructuras, no tienen hospitales. Puede
existir un parte rica por el hecho de que este sistema provoca muerte, provoca
pobreza. Esto es colonialismo. Para vivir “bien” una parte del mundo, necesita una
pobreza increíble, donde la sobreproducción es una sobreproducción en función
de la valorización de la transformación de la necesidad de la gente en
mercancía.
La FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura) dice que la producción alimentaria para el 2012 podía alimentar a
12 mil millones de personas. Si somos 7mil millones y 4 sufren hambre,
significa que hay una tecnología, una potencialidad para alimentar a 12-13 mil
millones de personas, pero sólo se le ofrece a uno o dos porque son los que
compran en función a la ganancia de la mercancía. Este es el sistema
capitalista.
Los compañeros de America Latina proponen un nuevo modelo de desarrollo que
se basa no tanto en las ganancias sino sobre complementariedad, sobre la solidaridad,
porque lo que necesitamos hoy es el socialismo. Hoy por hoy no hay otra
posibilidad, porque la parte que se pensaba que era rica y resolvió su problema
a través de la pobreza de otros, ya no es rica. En la UE y EEUU también es cada
vez mayor el número de pobres, hay nuevos pobres. Estamos reduciendo el grupo
de los ricos que viven gracias a una pobreza infinita.
En estos momentos en los que las grandes empresas
están acumulando grandes beneficios mientras que la mayoría de la población se
está empobreciendo, podemos concluir que la crisis es también un mecanismo más
en esta vía.
R. El problema es que esta crisis interesa en parte a la empresa, a los
bancos. Por eso lo primero que hacen es ayudar a los bancos y a las empresas multinacionales,
y no a los pobres, a los trabajadores…
L. Si entendemos el poder en términos de concentración de riqueza y de
poder, esto sí está ocurriendo. El poder se concentra siempre más en manos de
algunas multinacionales ligadas de manera fuerte a centros financieros. Algunos
dicen que hay un capitalismo malo que sería el financiero, y por otro lado
estaría el capitalismo productivo que sería el bueno. Esto es una locura porque
la parte financiera, el banco, el fondo monetario, toda la sociedad financiera
son parte integral del mismo sistema. Las finanzas no crean riqueza social,
sino una burbuja especulativa que tiende a explotar. No pueden ser las finanzas
la solución al problema de esta crisis sistémica.
¿Cómo definiríais la crisis actual?
R. Nosotros decimos que esta crisis es sistémica porque es una crisis
del sistema del capital, del capitalismo. No se puede buscar una solución
cambiando algunos puntos del sistema, el problema es que el mismo sistema está
explotando. La solución de la crisis del 29 fue la Segunda Guerra Mundial, esta
vez no sabemos que mecanismo encontrarán. Yo no pienso que mañana saldremos del
capitalismo, pero pienso que es difícil para los capitalistas en estos momentos
buscar una solución que pueda resolver todos los problemas sin que la situación
empeore para la clase obrera.
L. Cuando Rita habla de crisis sistémica, significa que involucra la
modalidad de producción del modelo capitalista. Hoy, a diferencia de 1929, el
capital no tiene un nuevo sistema de acumulación para salir de la crisis. En
1929 esto se hace con el Fordismo de masa, con la utilización en masa del
petróleo, con mantener fuerte la demanda pública —y no necesariamente la
demanda social, porque el keynesianismo se caracteriza por la demanda pública—.
La crisis del 29 se resuelve con un nuevo modelo de acumulación que es la
guerra, pero hoy, el capital no tiene un nuevo modelo de acumulación. Esto
significa que está disminuyendo la demanda global y esta disminuyendo la
ganancia.
Nosotros identificamos la crisis como la caída de la tasa de beneficio, el
beneficio aumenta pero disminuye la tasa de beneficio. Significa que para
mantener el beneficio tu necesitas un capitalismo de una masa de inversiones
siempre más alta, es decir, un nivel de explotación y recorte del gasto del
trabajo siempre mayor. Por eso, de esta crisis no pensamos que el capital tenga
la capacidad de salir en términos económicos. Este capitalismo no se puede
reformar.
¿Mañana se termina el capitalismo? No. Todo depende, como dice Marx, de la
lucha de clases. La correlación de fuerzas del movimiento obrero internacional
es muy mala, se trata de dar un impulso político a la lucha de clases. La
salida no es un nuevo Keynesianismo, la salida no es proponer un capitalismo
“suave”. La salida debe proponer un nuevo sujeto revolucionario al igual que
fue la burguesía durante la revolución francesa. Se tiene que crear una
correlación de fuerzas para la estrategia del cambio y la superación del modo
de producción capitalista. Por eso hay que pensar con una perspectiva que puede
ser de 5 años o 5000, depende de la relación de fuerzas. La única salida es
proponer una lucha táctica desde la perspectiva estratégica del socialismo.
Esta es la salida política.
¿Cuáles son las principales características de esta
crisis? ¿Existen diferencias de un Estado a otro?
L. Existen bloques (área monetaria, área comercial) que se están
confrontando en una competencia global. ¿Por qué? Porque cuando la tasa de
poder disminuye la competencia se hace más fuerte. Es normal puesto que el
mundo unilateral de EEUU terminó. Hoy esta la UE como otro bloque imperialista
donde el punto más fuerte es Alemania, pero hay también otros países que piden
su espacio en el mundo como pueden ser los BRICS (Brasil, Rusia, India, China,
Sudáfrica). No estoy diciendo que sean países socialistas, pero decimos que en
el área de la competencia van a buscar su espacio económico, comercial y
también político. Después existe el área del ALBA, que está en una fase de
transición al socialismo y que tiene un modelo completamente diferente del
capitalismo. Es un mundo diferente a diez años atrás.
¿Hasta dónde puede llegar esta situación?
R. La situación es mala pero puede ir a peor. Mi esperanza es que los
pueblos del mundo despierten. Por ejemplo en Italia, donde la situación es muy
mala, no hay una fuerte respuesta por parte de la mayoría de la población. La
que se moviliza es solo una parte pequeña. Yo creo que la situación va a llegar
a tal punto que la gente verá que la única manera es combatir a los grandes
centros de poder.
L. La esperanza que tenemos es que se creen condiciones de conflicto,
porque esta crisis no se ha terminado y puede empeorar. Si uno piensa que se
saldrá de esta crisis porque el capital tiene la voluntad positiva de crear
condiciones para una condición social y un mundo laboral mejor… está loco, no
es posible. Como siempre, el futuro del mundo del trabajo está en manos del
sujeto histórico que es la clase trabajadora organizada. Se trata de crear
condiciones de organización revolucionaria, izquierdista y de conflicto. Si
buscamos soluciones individuales, cada uno solo pensará en resolver sus
problemas. Yo pienso que esta crisis va a ir a más, va a alimentar una crisis
social y como organizaciones sindicales de clase, de fuerza revolucionaria,
debemos crear condiciones de lucha.
Todos los partidos que llegan al poder están
llevando a cabo las mismas políticas. Donde esta la alternativa para la
ciudadanía?
Yo creo que la historia no es lineal. El capitalismo propone una
linealidad de la historia con el capitalismo como última etapa. Pero no es así.
El ciclo histórico no es el mismo que el ciclo biológico. El capitalismo fue un
elemento revolucionario para la humanidad porque cambio la condición de
relación productiva, de la esclavitud al trabajo salarial, de rotura con la
época feudal, de avances tecnológicos. Por eso Marx habla de la burguesía como
clase revolucionaria. ¿Cuánto tiempo necesitó el capitalismo para afirmarse
como sistema? Si miramos un poco la historia, el modelo feudal entra en crisis
más o menos a finales de 1200 a comienzos de 1300, y para que el modelo
capitalista se convierta en modelo de producción hicieron falta 500 años. ¿Por
qué? Porque necesitó la acumulación primaria que llega con la misión de Colón.
Europa y España en particular necesitan la plata, oro, hierro, todos los
recursos de America Latina para crear la riqueza para impulsar este nuevo
modelo. Esto significó el genocidio de civilizaciones. Después necesitó otro
pasaje político, con la revolución francesa, que pone una clase que se
contrapone a la aristocracia. Y un tercer pasaje que es la revolución
industrial inglesa. Todo eso son 500 años, pero la necesidad histórica viene
desde el 1200. Hoy tenemos una necesidad histórica del socialismo, ¿pero cuánto
tiempo necesitará? No lo sabemos.
En pocos años se han dado muchos cambios en
América Latina. ¿Son un ejemplo a seguir? ¿Hay otros modelos en el mundo que
considera interesantes?
L. Yo pienso que cada pueblo tiene el derecho a la autodeterminación.
Hoy el nivel más alto de proceso revolucionario de transición al socialismo y
que nosotros apoyamos se están llevando en los países del ALBA: Cuba, la gran
resistencia socialista revolucionaria, la revolución Bolivariana, la revolución
de socialismo comunitario de Evo, Correa en Nicaragua. ¿Es un socialismo
realizado? ¿Es el paraíso? No. Es un proceso de transición que se pone
inmediatamente fuera de las reglas del capitalismo con formas contrarias a los
países del sistema capitalista como son las nacionalizaciones, empresas
socialistas, cooperativas, solidaridad, el banco del ALBA, Telesur…
¿Y China? No me atrevo a decir si es socialismo de
estado o capitalismo de mercado. Estamos hablando de un cuarto de la humanidad
que tiene un sistema que se llama socialista. Lo que es seguro que es un país
que se contrapone al imperialismo europeo y de EEUU.
Hay están también Palestina y el pueblo vasco, que estan luchando por la
autodeterminación.
El modelo a seguir es cada pueblo que se opone en función de su proceso de
autodeterminación y que busca e intenta pensar en una sociedad por lo menos
anticapitalista. En nuestro caso yo miro con más admiración la transición
socialista porque es nuestro ideal.
Se están planteando muchas dudas sobre el modelo
Europeo actual. ¿Cuál es vuestra opinión al respecto?
R. Es un modelo de capitalismo salvaje que va en contra de los
trabajadores, contra la población. No respeta a la población, los derechos
humanos, la salud. Lo importante para ellos es obtener ganancias.
Esto no ha empezado ahora, pero con la crisis está mostrando su lado más
feroz, que no tiene respeto para nadie. Decimos que Europa es un pueblo
imperialista en todos los aspectos. La creación de la UE fue la creación de un
contrapoder contra EEUU. EEUU ejercía su poder en America Latina, Europa hace
lo mismo con los países del Europa del Este o del norte de África. Esperamos
que estos países despierten como lo han hecho los países del ALBA.
L. Hace algunos años se hablaba de modelos capitalistas diferentes. Por
un lado el modelo ingles, que era el modelo más agresivo y por otro lado un
modelo más suave, el Aleman, que era más de carácter social y en el que el
conflicto era diferente y había un estado del bienestar. A día de hoy no existe
un modelo más suave, hoy el modelo europeo y el de Alemania es tan agresivo
como el de EEUU. Europa aplica el capitalismo más salvaje, utilizando formas de
represión de movimientos sociales. Y no sólo los de movimientos
antiimperialistas y anticapitalista radicales, combaten todas las formas de
conflicto, no se permite nada.
Por eso nosotros miramos al ALBA, no decimos que el modelo del ALBA se
puede exportar, pero cuando hablamos de hacer un ALBA Mediterránea significa
crear unas condiciones donde la toma de decisión sea democrática,
representativa, de base, popular, participativa. Donde se puede crear un área
de intercambio solidario entre los países del sur de Europa con el norte de
África. Cuando hablamos de la rotura con la salida del euro de la unión
europea, no se trata de regresar a la peseta, se trata de crear condiciones de
un área que pone un nuevo sujeto; el mundo del trabajo. Por eso miramos al ALBA
diciendo que, si en el ALBA están tomando forma socialismos diferentes (el
socialismo comunitario de Evo es diferente al de la revolución ciudadana de
Ecuador, el socialismo bolivariano es diferente al de Cuba), podemos imaginar
que se puede crear un área de transición socialista en Europa, donde el proceso
de producción y acumulación se haga a favor de los pueblos y de los
trabajadores. Por eso la transformación debe de venir sólo en esta perspectiva.
Volviendo a Euskal Herria ¿Quién debe impulsar la
construcción de una alternativa? (movimientos sociales, la clase trabajadora…)
¿Cómo?
R. Todos juntos, los movimientos sociales, la clase trabajadora… Es
necesario una unidad entre todos para alcanzar nuestro objetivo.
L. Me voy a permitir entrar en una cuestión histórica que es la
independencia del País Vasco. Apoyamos la autodeterminación en la forma de
lucha que el pueblo piensa que es correcta. No se puede comparar con parámetros
de Italia, nosotros tenemos un problema allí, aquí hay otro. La lucha
anticapitalista aquí es primero una lucha contra el imperio español y después
el de Europa. La cuestión vasca es una cuestión nacional del pueblo vasco, por
lo que se tiene que buscar la manera de involucrar en este proceso el máximo de
fuerzas posibles que apoyen de alguna manera la independencia y después,
espero, que tengan una perspectiva anticapitalista y antiimperialista. La unión
de movimientos sociales, de sindicatos de clase, de fuerzas políticas donde se
impone de manera fuerte la idea de la transformación social, no sólo de la
independencia, tiene todo nuestro apoyo.
Hemos hablado del imperialismo del siglo XXI, cómo
debe ser el sindicalismo del siglo XXI.
L. La forma de sindicalismo debe respetar la fase. Estamos en una fase
de capitalismo diferente, de un imperialismo diferente y una condición del
mundo del trabajo diferente. Hoy existe la precariedad, la flexibilidad, existe
el problema de los migrantes, de los jóvenes…Por eso tiene que ser un
sindicalismo de clase, conflictivo. La mayoría de los sindicatos de Europa son
sindicatos colaborativos con los gobiernos, esta es una falta de respeto a la
voluntad de transformación histórica que el mundo trabajador quiere. La
característica tiene que ser la independencia absoluta del sistema de
desarrollo capitalista y de los partidos políticos que representan a este. Un
sindicalismo conflictivo, de clase, independiente, que no va aceptar ninguna
colaboración con el desarrollo capitalista y que tiene que interpretar la
voluntad de un nuevo sujeto social, de los jóvenes en particular, en el respeto
de la autonomía de cada sujeto.
Euskal Herria es un país sin estado. ¿La
construcción de una alternativa para Euskal Herria pasa necesariamente por la
construcción de un Estado?
R. Nosotros podemos decir que apoyamos la construcción de un Estado pero
no sabemos como puede ser la realización.
L. La forma es vuestra. La decisión es vuestra. Yo digo que como
marxistas que somos, como comunistas que somos, nuestra acción está fuertemente
caracterizada por el internacionalismo y el internacionalismo significa el
respeto de los procesos de autodeterminación. Respetamos la voluntad de vuestro
pueblo.
Publicado por LaQnadlSol
CT.USA.