viernes, 2 de octubre de 2015

En la ONU Putin confronta el excepcionalismo de Obama

“No puedo evitar preguntarle a quienes han causado esta situación, ¿se dan cuenta de lo que han hecho? Pero me temo que nadie va a contestar eso. En realidad, las políticas fundamentadas en la vanidad y la creencia en la excepcionalidad e impunidad de uno nunca han sido abandonadas”.


EN LA ONU PUTIN CONFRONTA
EL EXCEPCIONALISMO DE OBAMA



Las condiciones estaban dadas para la confrontación en el seno de la ONU, ambos líderes mundiales inevitablemente chocarían, sus posiciones e intereses contrastan enormemente el uno con el otro. Mientras Obama hacia uso de su ya repetido discurso cargado de distorsiones y de referencias que no se ajustan a la realidad de los hechos que el mundo observa y experimenta en carne propia diariamente, especialmente en aquellas regiones más castigadas por la cruzada democratizadora liderada por Washington y sus aliados occidentales, el presidente ruso Vladimir Putin iba directo al grano y sin rodeos indicaba que uno no debe jugar o manipular las palabras. Cada término en el derecho internacional y las relaciones internacionales debe ser claro, transparente y tener criterios entendidos uniformemente. Todos somos diferentes, y debemos respetar eso. Nadie, dijo el presidente ruso, “tiene que conformarse a un solo modelo de desarrollo que alguien de una vez y por todas ha reconocido como el único correcto. Todos debemos recordar lo que nuestro pasado nos ha enseñado”.

Pero sin duda el momento más álgido del discurso del presidente  Putin en la ONU fue cuando respondiendo a las absurdas afirmaciones de Obama sobre el papel constructivo de los Estados Unidos en los desastres que han propiciado en Ucrania, Libia y Siria, el presidente Putin dijo: “No puedo evitar preguntarle a quienes han causado esta situación, ¿se dan cuenta de lo que han hecho? Pero me temo que nadie va a contestar eso. En realidad, las políticas fundamentadas en la vanidad y la creencia en la excepcionalidad e impunidad de uno nunca han sido abandonadas”.

Anteriormente y en referencia a las declaraciones de Obama sobre el peligro que representan aquellas naciones que rechazan las lecciones de la historia a diferencia de los EE.UU que actúa consiente de las lecciones del pasado -no solo las lecciones de Irak, sino también el ejemplo de Libia, donde nos unimos a una coalición internacional bajo el mandato de la ONU para prevenir una masacre, Putin dijo: “Parece, sin embargo, que lejos de aprender de los errores de otros, algunos prefieren repetirlos y seguir exportando revoluciones, con la diferencia que ahora son revoluciones democraticas”.

Criticando con dureza los resultados de tales revoluciones democráticas, Putin dijo: “En lugar de propiciar reformas, la agresiva interferencia foránea ha resultado en la flagrante destrucción de instituciones nacionales y del estilo de vida mismo. En lugar del triunfo de la democracia y el progreso, hemos logrado violencia, pobreza y desastre social. A nadie le importa en lo más mínimo los derechos humanos, incluyendo el derecho a la vida”.

Como se esperaba, los desacuerdos entre Obama y Putin se hicieron más que patentes en el caso del candente conflicto en Siria en donde ambos, aparte del choque de sus propios intereses geoestratégicos, manifiestan posiciones diametralmente opuestas sobre cómo encontrarle una salida a la guerra que enfrenta al legitimo gobierno sirio de Assad contra las bandas de terroristas yihadistas del Estado Islámico y el Frente Nusra, apoyadas por occidente y sus aliados del CCG, Turquía e Israel, que controlan grandes porciones del territorio sirio y que tienen como meta, en consonancia con sus patrocinadores,  la eliminación del gobierno de Assad.  

Para Obama la solución irremediablemente está sujeta a la salida de Assad al que considera como el principal culpable del inicio de la guerra y de todo el sufrimiento humano que está teniendo lugar allí, además según su retorcida interpretación, es la presencia y la brutalidad del régimen de Assad lo que ha creado las condiciones para el surgimiento del EI y sus métodos salvajes, por lo tanto considera Obama, que para terminar con la amenaza del EI, el realismo demanda de una transición manejada, en la cual se podría trabajar incluso con Rusia e Irán, pero en definitiva y después de toda la carnicería no hay manera de retornar al status quo anterior a la guerra, es decir, Assad debe irse, así lo exige Estados Unidos que ha estado realizando ataques aéreos ilegítimos contra el EI en Siria sin contar con el acuerdo de su gobierno ni con el respaldo de una resolución de la ONU.

Para Putin, el gobierno de Assad al igual que las milicias kurdas son las únicas fuerzas que en realidad han estado combatiendo a las fuerzas mercenarias del EI, por lo tanto considera el presidente ruso, “es un gran error rehusarse a cooperar con las autoridades sirias y las fuerzas gubernamentales que valientemente combaten a los terroristas en el terreno. De acuerdo a Putin la permanencia de Assad es fundamental tanto en el presente como en el futuro de  Siria.

Refiriéndose al  Estado Islámico, el presidente ruso dijo que “es una agrupación terrorista que no apareció de la nada, fue creado inicialmente como un arma a ser usada contra gobiernos seculares indeseables, cuenta con decenas de militantes que combaten por él, incluyendo ex soldados iraquíes que fueron dejados en la calle después de la invasión de 2003. Muchos de sus combatientes provienen de Libia que fue destruida como resultado de la grosera violación de la Resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU. Recientemente se le han unido varios miembros de la llamada oposición “moderada” siria apoyada, entrenada y armada por occidente. Habiendo establecido control sobre partes de Siria e Irak, el Estado Islámico ahora se expande agresivamente en otras regiones. Busca establecer su dominio sobre el mundo musulmán y más allá. Sus planes van más allá”.

Como respuesta a las vacías declaraciones de Obama sobre la necesidad de combatir el terrorismo, Putin dijo:

"Es hipócrita e irresponsable hacer declaraciones acerca de la amenaza del terrorismo y al mismo tiempo hacerse de la vista gorda a los medios utilizados para financiar y apoyar a terroristas, incluyendo ingresos por el tráfico de drogas, el tráfico ilegal de petróleo y el comercio de armas. Es igualmente irresponsable manipular los grupos extremistas y utilizarlos para lograr sus objetivos políticos, con la esperanza de que más adelante se encontrará una manera de deshacerse de ellos o de alguna manera eliminarlos".

La única manera de hacerle  frente a la actual crisis internacional es a través de la creación de "una genuina y amplia coalición internacional contra el terrorismo", dijo Putin. "Similar a la coalición anti-Hitler, la cual podría unir a una amplia gama de partes dispuestas a luchar contra aquellos que, al igual que los nazis, siembran el mal y el odio en la humanidad. Y, por supuesto, las naciones musulmanas deben desempeñar un papel clave en esa coalición".

El discurso de Putin además de demoler las pretensiones excepcionalistas de Obama, constituyó un reto a la duplicidad que su gobierno ha venido mostrando en relación al Estado Islámico, al que mientras por un lado pretende combatir, por el otro permite su avance utilizándolo como instrumento para el logro de su gran objetivo, la remoción del gobierno de Assad. El presidente ruso ha entendido perfectamente el peligro que conlleva para los intereses de Rusia y sus aliados la duplicidad estadounidense, razón por la cual demanda que Obama asuma una posición firme y correcta -que se apegue a la legalidad- y acepte formar parte de la gran coalición que Putin propone como instrumento para combatir y erradicar la amenaza del EI en el Medio Oriente y evitar que se siga propagando por otras regiones.


La decisión tomada por Rusia de entrar directamente en el conflicto en Siria, es el reconocimiento de la necesidad de enfrentar a su rival estadounidense en el propio campo de batalla sirio, en donde según los expertos se está librando una guerra de baja intensidad entre las principales potencias capitalistas y sus respectivas visiones sobre el orden internacional que debe regir los destinos del mundo: el viejo orden unipolar basado en la hegemonía de los EE.UU, o el orden multipolar que viene emergiendo comandado por Rusia y China.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario