domingo, 5 de marzo de 2017

Las alucinaciones de Jimmy, un presidente guatemalteco en problemas

El presidente posiblemente tendrá que salir del gobierno, pero no por golpistas, sino por él mismo, por su propia mano,  porque es notoria su incompetencia política, su falta de liderazgo en el ejecutivo que permita impulsar políticas públicas estratégicas de beneficio a la población y que lo ha hecho rehén de los políticos inescrupulosos que están boicoteando la reformas judiciales y el derecho indígena, pero sobre todo del CACIF, como un tardío dinosaurio jurásico, de vista escasa, no ve el creciente malestar social que va llegando, lenta pero inexorablemente, a un punto de no retorno de imprevisibles consecuencias.


LAS ALUCINACIONES DE JIMMY,                                                        
UN PRESIDENTE GUATEMALTECO EN PROBLEMAS


Por Luciano Castro Barillas

Un fantasma siniestro y nada bromista  e inocuo como un poltergeist, ronda desde hace meses por las noches  las habitaciones del presidente Jimmy Morales, y no se le aparece con botas y charreteras militares, si no de pachuco, de civil; con el pantalón muy ceñido, un poco arriba del ombligo, por lo que se presume sea un soldado de franco que no ha sabido disfrazarse de la manera debida para disimular su origen, su procedencia y a quién realmente le anda haciendo los mandados.

Este fantasma patoso y muy pícaro, le desaconseja al oído al presidente de Guatemala solo malas cosas, como por ejemplo, que haga ridículos paralelismos entre que nos es lo mismo defender a un hijo de un acto ilícito, de un muchacho que le salió mañoso muy tempranamente,  que defender a una figura designada por las Naciones Unidas para dirigir el organismo que de manera muy gallarda dirige este buen hombre colombiano que, de veras, ha hecho tanto bien a este país hundido hasta el cuello en la fosa de heces fecales creadas desde hace más de 60 años por las oligarquías y las sucesivas tiranías militares; enjuiciando a tantos funcionarios corruptos, ladrones, que parecen surgir de un saco sin fondo. Da la impresión de que todo el pueblo de Guatemala es un gran conjunto de ladrones porque caen, gracias a las acciones del señor Comisionado, como moscas, malvivientes de saco y corbata, cuyas raterías son inocultables y abundantes.

Ese fantasma se le instaló una noche de estas y le musitó al oído que le iban a dar golpe de Estado y que en esa conspiración ¡vaya cosa! no estaba involucrado ningún militar, que a ellos ya se les había quitado esas malas costumbres, que los de la felonía eran ni más ni menos que el Embajador de los Estados Unidos, el comisionado de la CICIG, los intelectuales del Instituto de Análisis de los Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, también los del Grupo Semilla (no incluyendo a Edelberto Torres Rivas porque con eso de decir que los indios eran problemáticos los mayas no pueden verlo pero ni pintado), pero los meros peligrosos eran los activistas de derechos humanos, quienes están metiendo al bote a cuanto general y coronel se les cruza en su camino, por haber matado solo a 538 personas en la sede de Creompaz, poca cuenta, según ellos, porque hay otros osarios clandestinos que sí verdaderamente son generosos en cuanto a restos humanos se refiere.
El presidente posiblemente tendrá que salir del gobierno, pero no por golpistas, sino por él mismo, por su propia mano,  porque es notoria su incompetencia política, su falta de liderazgo en el ejecutivo que permita impulsar políticas públicas estratégicas de beneficio a la población y que lo ha hecho rehén de los políticos inescrupulosos que están boicoteando la reformas judiciales y el derecho indígena, pero sobre todo del CACIF, como un tardío dinosaurio jurásico, de vista escasa, no ve el creciente malestar social que va llegando, lenta pero inexorablemente, a un punto de no retorno de imprevisibles consecuencias. Y no hablo de estallidos sociales, eso no puede ocurrir en el Segundo Patio Trasero de los Estados Unidos; sino por perjudicar los intereses estratégicos del coloso del norte que está empeñado, por sus problemas migratorios ocasionados por la migración ilegal de centroamericanos y mexicanos; en viabilizar, a como dé lugar, el ofrecimiento de campaña del candidato Trump y ahora presidente, de crear dos muros: uno de cemento armado entre México y Estados Unidos y otro muro menos visible que es la inversión en el “desarrollo” de los países del triángulo norte, Guatemala, El Salvador y Honduras.


El fantasma pícaro no le cuenta eso, no lo orienta para que vea con una perspectiva más profunda cuáles son los intereses fundamentales del imperio en la actual coyuntura trumpiana. Por eso podría ser relevado del cargo vía incompetencia burocrática, trastorno emocional profundo, esquizofrenia con alucinaciones visuales y auditivas y llegar a un estado catatónico de rigidez muscular, de engarrotamiento; propio de los enfermos psiquiátricos sin una debida medicación. Quizá el asunto es más simple, este hombre muy dado a la broma y tomar las cosas en serio, no cayó en la cuenta cuando le ofrecieron ser candidato de los militares, que, literalmente, como dice el refranero popular guatemalteco, se estaba metiendo en calzones de once varas con esas peculiares amistades.  En fin, golpes tradicionales son inviables en este país porque no los autoriza los Estados Unidos, solo pueden haber golpes muy estilizados, cuando el Congreso recibiendo a saber qué presiones, declare al Presidente mentalmente incapaz de gobernar al país y sea separado del cargo. Realmente le harán un gran favor a este paciente.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

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