Una a una las “democracias” occidentales se desbaratan, como piezas de dominó

Todas las “democracias” Occidentales están entrando en estado de crisis como resultado de sus desacertadas medidas en contra de Rusia. Todas las medidas sancionatorias en contra de la Federación Rusa son fruto de la ira, del hígado; de la improvisación y del servilismo incondicional con los Estados Unidos.

 

UNA A UNA LAS “DEMOCRACIAS” OCCIDENTALES
SE DESBARATAN, COMO PIEZAS DE DOMINÓ

Luciano Castro Barillas
Escritor y Analista Político6
La Cuna del Sol

Todas las “democracias” Occidentales están entrando en estado de crisis como resultado de sus desacertadas medidas en contra de Rusia. Todas las medidas sancionatorias en contra de la Federación Rusa son fruto de la ira, del hígado; de la improvisación y del servilismo incondicional con los Estados Unidos. La excusa de Ucrania no iba a funcionar por mucho tiempo porque el objetivo principal fue siempre el país eslavo.

Todas las acciones tomadas por los gobiernos occidentales fueron inconsultas. La caída del premier británico nunca fue por sus desenfadadas declaraciones y la falta de respeto con funcionarios internacionales, obviando las reglas de la diplomacia. Esa manera de ser, al final, no dejó nunca de gustar a la mayoría de flemáticos ingleses. Lo que afectó realmente fue que el señor Johnson en su afán de quedar bien con Washington asumió el papel de escudero, sin que le preocupara las grandes dificultades para acceso a la canasta básica por la que están pasando las capas medias y trabajadoras británicas. La desatención en salud y educación y claro, por qué no, el despilfarro del dinero de los contribuyentes como lo fue el hecho de gastarse el señor Johnson 250 mil libras en remodelar un apartamento con el dinero de los contribuyentes.

Esa profunda descomposición de los políticos británicos se refleja en un asunto de hace pocas horas, cuando Andrea Jenkyns, la nueva ministra de educación británica, ante el abucheo de que eran objeto luego de salir de una reunión en Downing Street, contestó a los protestantes con un gesto vulgar y perjudicial para ella misma, la obscena señal del dedo medio introducido en el recto. Bonita la señora, pero su educación es pésima y debe dimitir de su cargo inmediatamente para no poner las cosas peor de lo que están. Sin embargo, dicha señora tiene el atrevimiento de hacer declaraciones tales como “que nuestro sistema de educación y atención, ayudan a formar la nueva generación y a sentar las bases del futuro”. Palabras, solo palabras de una demagoga politiquera.

Pero lo peor estar por venir en Alemania y cuya protesta empezó con una carta abierta suscrita por los intelectuales alemanes, entre otros firmantes, la escritora  Julia Zeh y el filósofo Richard David Precht, quienes exhortan a la clase política dirigente de Alemania a impulsar un proceso de diálogo con Rusia para poner fin a la guerra y no meterse en más problemas de los que están metidos, ante un hecho que no ven los ojos miopes de los políticos: no puede Ucrania, ni en sueños, ganar una guerra contra Rusia. Esto hizo decir, rojo de ira, al embajador ucraniano en Alemania, el señor Andrei Melenik, poco disimulado nazi; “otra vez no, qué montón de perdedores pseudo-intelectuales”. Es el mismo exigente sujeto que ante la reluctancia del canciller Olaf Scholz para enviar las armas pesadas a Ucrania lo hizo decir del señor canciller “salchicha de hígado ofendida”. En un afán de ofensa pues si algo caracteriza al canciller alemán es tibieza e inseguridad.

Pero los atropellos de la clase política nazi de Ucrania no quedan allí pues para mediados de abril el presidente de Alemania, el señor Frank-Walter Stenmeier, ya estando en Kiev para una visitar de sus “aliados” ucranianos no fue recibido por el impertinente y drogadicto Zelenski. Todo esto tiene molestos a los ciudadanos alemanes que se están movilizando contra un gobierno que, definitivamente, está haciendo mal las cosas para los intereses del pueblo alemán. Pues no por gusto la gran central gasífera está pidiendo auxilio del gobierno porque la situación de la energía relacionada con el gas y el petróleo ruso se está volviendo insostenible. Por su lado, en Bulgaria, las cosas no están nada bien para sus políticos pues están por defenestrar a su presidente que igual que británicos y alemanes están haciendo terriblemente mal las acciones de gobierno.

Así se están derrumbando las democracias europeas, al son de las insensateces y con una Rusia que ordenó a su industria armamentística estar en producción de municiones y armas las 24 horas. ¿Tendrá acaso Rusia las de perder en esta guerra contra Ucrania? Indudablemente no, porque el dinero en Rusia es abundante para mantener su industria bélica dinámica y diversificada. No están perjudicando a los ciudadanos rusos en esta guerra. Esa es la gran diferencia con las “democracias occidentales” donde los pobres con una inflación galopante se están quedando sin acceso a los bienes más elementales para la vida humana.  

Publicado por La Cuna del Sol