La ilegal acción de
reconocer la soberanía israelí sobre los Altos del Golán de Siria de parte de
Donald Trump hace más difícil, sino imposible, cualquier acuerdo de paz en el
mundo árabe. Es la provocación más reciente y peligrosa.
TRUMP ECHÁNDOLE LEÑA
AL FUEGO:
LOS ALTOS DEL GOLÁN
SON DE SIRIA, NO DE ISRAEL
Por Luciano Castro Barillas
Las provocaciones imperialistas en el Medio
Oriente no cesan en ningún punto de la tierra. La ilegal acción de reconocer la
soberanía israelí sobre los Altos del Golán de Siria de parte de Donald Trump
hace más difícil, sino imposible, cualquier acuerdo de paz en el mundo árabe.
Es la provocación más reciente y peligrosa. Su prepotencia y abuso se
manifiesta con pretender indicarle a la misión militar rusa que tienen que irse
de Venezuela, sin reparar en las bases militares que tiene en Colombia. La
semana anterior provocó con sus navíos en el mar territorial chino en el
estrecho de Taiwán. Provocan a Rusia con sanciones inefectivas y se empeñaron
en vincular a Moscú con los escándalos e intrigas propias de los políticos y
gánsteres de los Estados Unidos. La trama rusa es una pobre invención de esta
clase de millonarios holgazanes que no
teniendo algo mejor por hacer buscan, de cualquier modo, mantener viva la
conflictividad entre las dos potencias.
Nadie que se llame Estado respetable ha
reconocido nunca la soberanía israelí sobre los Altos del Golán. La mejor
tierra de Siria, de 1,500 kilómetros cuadrados. Una especie de oasis en la
resequedad de esa tierra donde abunda el agua (30% del agua utilizada en Israel
llega de Siria), tierra agrícola de gran fertilidad y cuyo subsuelo no lo es
menos: es una región rica en petróleo y gas natural. Los Altos del Golán han
sido paulatinamente colonizados por los israelíes con el apoyo de los Estados
Unidos y acostumbrados al despojo desde siempre (no olvidemos que los Estados
Unidos le robaron a México más del 50% de su territorio) no les inmuta, no le
da pena, no altera su fuero interno; seguir robando, apropiándose de lo que no
les pertenece.
El sionismo de la mano del imperialismo es lo
peor que le ha ocurrido a la humanidad. Los judíos de religión y cultura, son
personas de paz, tolerantes, democráticos, no los patéticos retrógrados
fanáticos reaccionarios dizque cumplidores de ley que no dejan de ser, dos mil
años después, como dijera Cristo, sepulcros
blanqueados por fuera y podridos por dentro. Y pareciera imposible que así
fuera, pero lo es. Estos sionistas son los seres más arbitrarios y
reaccionarios del mundo. Después que Donal Trump hiciera esa declaración en
Washington, a la par del sinvergüenza de Netanyahu sobre la nueva soberanía de
los Altos del Golán, encima del agravio, por la noche, aviones israelíes
atacaron instalaciones civiles de Alepo, en Siria, no causando víctimas, pero
sí daños materiales. ¿Qué personas son las que dirigen a Israel y Estados
Unidos? Lo peor, por lo que se ve.
¿Ha sido así esta gente codiciosa siempre?
Porque de víctimas pasaron a ser victimarios. Contando con aliados gratuitos,
no solicitados, como lo son los diferentes feligreses de las iglesias
protestantes de América Latina y los Estados Unidos. Allí se mueve esa falsa
ideología de “los hijos del pueblo de
Dios”. Y ante la falta de discernimiento y fanatismo extremo, los
protestantes son los perfectos aliados de una política mundial antihumanitaria
y fascista. De veras, un cristianismo hecho pedazos, desvirtuado y vaciado de
sus contenidos espirituales fundamentales. Disculpen que no los pueda querer,
pero me resultan despreciables por su hipocresía y por su estupidez.
Publicado por La Cuna del Sol
USA.
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