sábado, 10 de agosto de 2024

Boxeo entre diputados granujas…

Muchos guatemaltecos le expresamos nuestro agradecimiento al diputado Aguirre (del partido Cabal) por haberle cerrado la boca, aunque sea por unos cuantos segundos, al diputado Allan Rodríguez, cabeza visible como Consuelo Porras, de la corrupción en Guatemala.

 

BOXING CONTAC
ENTRE DIPUTADOS GRANUJAS
DEL CONGRESO DE GUATEMALA



Luciano Castro Barillas
Escritor y Analista Político
La Cuna del Sol

Muchos guatemaltecos le expresamos nuestro agradecimiento al diputado Aguirre (del partido Cabal) por haberle cerrado la boca, aunque sea por unos cuantos segundos, al diputado Allan Rodríguez, cabeza visible como Consuelo Porras, de la corrupción en Guatemala. Recibió este gordo mafioso tal andanada de puñetazos que tuvieron que levantarlo del suelo sus guarda espaldas bastante desorientado, casi al punto del nockaut técnico. Pero tuvo, este amo y señor del sobrepeso, arrestos para decirle al diputado Aguirre que “¡te voy a echar a la fiscal!”. Profirió improperios y amenazas y su error fue de cálculo.

De donde él es originario nadie osa desafiarlo. Es casi un señor feudal: prepotente, abusivo, de incuantificable riqueza mal habida y a lo mejor todavía cobra a sus súbditos derecho de pernada. Acostumbrado a que lo que él dice se hace. Realmente es omnipotente en Totonicapán y tiene un base clientelar, de voto cautivo indígena, que da miedo. Fluye la canasta básica para todos sus allegados y cuando no es así hay aportes en efectivo. Tiene como única oposición política a los indígenas de Totonicapán organizados en “Los 48 Cantones”. Nadie ha podido políticamente contra él y se yergue a perpetuidad, inconmovible, como una maciza roca en alta mar.

Las razones del pleito de estos bellacos fue el presidente Bernardo Arévalo. El gordo Rodríguez acusaba al diputado Aguirre de haber tenido un encuentro con el presidente donde, dada su febril imaginación y mañas, asumió que estaban asegurando el voto para la iniciativa de ley de la Ampliación Presupuestaria. Ello significaba darle al régimen de Semilla un respiro ante tanto acoso institucional que lo tiene prácticamente sin oxígeno político.

El gordo Rodríguez tiene la misión de los poderes facticos de quebrantar este modesto esfuerzo de democratización. Luce bien pagado y se encuentra sumamente molesto porque sus empresas constructoras no han recibido un encargo del Estado. Arévalo no les ha dado tampoco dinero para promover la creación de leyes, ni ha repartido contratos para que anden saludando con sombrero ajeno en sus respectivos distritos. Esa es la razón de fondo. Con Arévalo no se puede negociar en la oscuridad, como a ellos siempre les gustó a lo largo de estos veinte años y acostumbrados a una vida de dispendio y ostentación, claro, la actual coyuntura política no es de su agrado.

Es fuerte su razón, su sinrazón, para fraguar un Golpe de Estado. De hecho, el golpe de Estado Técnico está dado porque tienen maniatado al gobierno en todas sus acciones políticas, pero no les basta con eso. Quieren todo. Al 100%. Están enloquecidos por el poder y la codicia y como la perspectiva que las fuerzas reaccionarias de Estados Unidos encabezadas por Donal Trump se hagan con el triunfo electoral, se han ido moderando con lo cobarde que es la gente de derecha. Muy dados al pleito montonero, cuando ven que los hechos van saliendo de otra manera y no como se lo habían imaginado, se desenvalentonan, se les mete el miedo y se quedan expectantes como buitres. Así son los derechistas de todo el mundo, bastante cobardes. Pero en fin, de lo que se saca de verdad es que el señor Luis Aguirre expresó lo siguiente, refiriéndose a Allan Rodríguez: “Lo senté a puros vergazos porque es una mierda”.




Publicado por La Cuna del Sol

No hay comentarios.:

Publicar un comentario