miércoles, 30 de agosto de 2017

¡Cuidado, su presidente puede estar loco!

Sin ánimo de ironizar sobre algún problema de salud mental del mandatario guatemalteco, resulta muy preocupante que la decisión de expulsar del país al Comisionado contra la Impunidad de la ONU, don Iván Velásquez, haya sido dictada por un espíritu chocarrero que se le reveló en una de sus tantas noches de angustia por andar ligado con malas amistades y le dio severísimas y equivocadas instrucciones que, sin tardanza, debía mandar patitas a la calle al Comisionado Iván Velásquez. Pareciera esto broma, pero no lo es.


¡CUIDADO, SU PRESIDENTE PUEDE ESTAR LOCO!


Por Luciano Castro Barillas

El republicanismo del siglo XVIII hizo muy bien al separar la Iglesia del Estado. Son dos puntos de vista, dos ideas, dos concepciones del mundo y de la vida totalmente opuestas, pues la Fe es irreconciliable con la Razón. Y eso lo vemos, ya a nivel de práctica política, en estos días revueltos de Guatemala, cuando el presidente de la república, señor Jimmy Morales, no logra delimitar de la manera debida si es el Primer Magistrado de la Nación o un Ministro Evangélico. Ante tal ambivalencia conceptual y vivencial, es muy lógico que un Estado acompañado de su Nación se vaya con relativa facilidad al más profundo barranco de ingobernabilidad.

Sin ánimo de ironizar sobre algún problema de salud mental del mandatario guatemalteco, resulta muy preocupante que la decisión de expulsar del país al Comisionado contra la Impunidad de la ONU, don Iván Velásquez, haya sido dictada por un espíritu chocarrero que se le reveló en una de sus tantas noches de angustia por andar ligado con malas amistades y le dio severísimas y equivocadas instrucciones que, sin tardanza, debía mandar patitas a la calle al Comisionado Iván Velásquez. Pareciera esto broma, pero no lo es. Él lo ha dicho que en una de sus habituales oraciones, tuvo un arrebato místico y Dios le indicó lo que tenía qué hacer, sin embargo, pudo haber sido también un Diablo Chingón que le hizo caer en ese pecado constitucional de expulsar, con abuso de autoridad y por encima de normas de la Constitución de la República, tal los artículos 182 y 194, que dicen: (...) el presidente de la República actuará siempre con los Ministros, en Consejo, o separadamente, con uno o más de ellos.

Pero el decreto o acuerdo ejecutivo lo firmó solo él, solito en su tontera. (...) velar por el estricto cumplimiento de las leyes, la probidad administrativa... De lo cual adolece el presidente, porque con la emisión del acuerdo de expulsión actuó como juez y parte. Es decir, obstruir la justicia y socavar la democracia porque la investigación criminal va contra él por haber, disculpe usted, "indicios racionales en la comisión de un delito". Y no es invención ni del Comisionado, ni de la Fiscal General, ni de la prensa, a la que culpa de no arropar sus muladas. Todo está debidamente sustentado pues ambos son profesionales de amplia experiencia, no pasantes de derecho inexpertos. Nadie lo está condenando, aunque tendrá que demostrar que lo que se presume de él, no es así. Molesta también su cinismo al afirmar que su acción de expulsión de don Iván Velásquez responde a su preocupación "por el Estado de Derecho, la soberanía y la democracia". Realmente, por acción de la ley, el presidente ha sido reducido en el momento actual en que la Corte de Constitucionalidad resolvió el amparo definitivo a favor del Comisionado; en un pobre hombre sin futuro, porque es inevitable su procesamiento judicial y la renuncia al cargo, más temprano que tarde, de presidente de Guatemala.

Preocupa de igual manera la clase de personas que se solidarizaron con él en esta pena y que, por supuesto, no lo acompañarán en la cárcel, como el inefable Ricardo Méndez Ruiz de la Fundación contra el Terrorismo, los alcaldes mañosos que son pródigos en esta tierra bendita de Guatemala y los diputados patosos, de delincuencia incompetente, que van igualmente por el camino del desaforo porque la sombra ominosa de Oderbrecht, la gran transnacional corrupta del Brasil, se cierne sobre sus cabezas como la espada de Damocles por el dinero que recibieron de buena gana bajo su curul. Incluso resultó otro loco en el pandemónium de estos días: Alvaro Arzú que ofreció al pueblo alzarse en armas y hacer la guerra. ¿Fue otra broma como la que se gastó hace meses atrás al ofrecerles garrote a los vendedores vandálicos y verdaderamente callejeros de la ciudad? Ojalá así sea, porque ahora sí puede ser procesado por reincidente al convocar y exhortar a la violencia.


Este pueblo no necesita ya de guerras, ni de señores de la guerra. En fin, don Iván se queda y sale fortalecido de este encontronazo porque ahora ya no se le quitará el sueño solo al presidente sino a esa morralla de mañosos que abundan en el tinglado nacional, con los cuales no se puede impulsar nada (por si acaso hay algunos ingenuos que creen que dialogando con ellos se puede llegar a acuerdos), a no ser acuerdos sobre tropelías y deshonestidades. La sangre, pues, no llegó al río y no queda de otra que empezar a reconstruir lo que irremediablemente quedó averiado por las acciones irresponsables del mandatario y sus adláteres. Es un hecho que se le dio tremenda trompada a la confianza, a la seguridad, a la democracia, a las buenas costumbres y a la paz.-






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

lunes, 28 de agosto de 2017

Charlottesville y el escándalo supremacista

A pesar de la abundancia de hechos históricos que evidencian la naturaleza supremacista, racista y esclavista sobre los cuales se ha fundado la existencia y el poder de los EE.UU, y que dado lugar a todo tipo de atrocidades en suelo propio y foráneo, nada de esto es siquiera insinuado mucho menos criticado abiertamente por quienes ahora se sienten ofendidos por el racismo y la violencia supremacista blanca desplegada en Charlottesville que parece ser lo único que merece la atención, como si se tratara de una anomalía, algo inusual en la historia, descontaminada, del imperio más benevolente, según sus apologistas, que alguna vez haya existido sobre la faz de la tierra.


CHARLOTTESVILLE Y EL
ESCÁNDALO SUPREMACISTA



Los violentos incidentes en Charlottesville, Virginia,  protagonizados por grupos supremacistas blancos del Ku-Klux- Klan y los denominados por los medios como Neo-Cofederados que protestaban la remoción de un monumento conmemorativo de uno de sus héroes, el general secesionista y reputado esclavista Robert E. Lee, han provocado las más virulentas como hipócritas reacciones de todo el establishment blanco estadounidense ante lo que consideran como no representativo, una afrenta, a la esencia del ser estadounidense (americano). Sin embargo, esas reacciones solo buscan ofuscar la verdadera naturaleza o la historia de una nación que fundamenta su poder político, económico y militar, precisamente en las ideas del supremacismo blanco, practicado en todas las etapas de la historia de los estados Unidos.

En  Counter Punch, Michael J. Sainato en su artículo, “El racismo en Charlottesville es un síntoma de una nación construida sobre la supremacía blanca”, escribe lo siguiente:

“El racismo y la supremacía blanca manifestados en la concentración supremacista blanca en Charlottesville, es sintomático de una cultura en Estados Unidos que ha ocultado su historia, ignorado su desenfrenado abuso de los derechos humanos y disimulado lo más oscuro de su pasado para formular un visión distorsionada del excepcionalismo estadounidense fundamentado en la supremacía blanca. Estados Unidos fue construido sobre la esclavitud, genocidio, violencia, y la supremacía blanca masculina que durante siglos ha explotad a otros con fines de lucro y poder, y continua haciéndolo hasta el día de hoy. La autoridad moral del excepcionalismo estadounidense al que han recurrido algunas personas para repudiar el odio en la concentración, con argumentos de que “esto no es America”, demuestra la amnesia histórica o la negativa a aceptar responsabilidad por esta historia”.

A pesar de la abundancia de hechos históricos que evidencian la naturaleza supremacista, racista y esclavista sobre los cuales se ha fundado la existencia y el poder de los EE.UU, y que dado lugar a todo tipo de atrocidades en suelo propio y foráneo, nada de esto es siquiera insinuado mucho menos criticado abiertamente por quienes ahora se sienten ofendidos por el racismo y la violencia supremacista blanca desplegada en Charlottesville que parece ser lo único que merece la atención, como si se tratara de una anomalía, algo inusual en la historia, descontaminada, del imperio más benevolente, según sus apologistas, que alguna vez haya existido sobre la faz de la tierra.

Ajamu Baraka (Counter Punch): “La supremacía blanca que algunos vemos como más insidiosa no está  reflejada en las simples, estereotipadas imágenes del saludo Nazi del iracundo miembro de la Alt-Right (Derecha Alternativa) o incluso Donald Trump. Más bien, es la ideología supremacista blanca, normalizada y por consiguiente invisible, inculcada en las instituciones culturales y educativas, y las políticas que se derivan de esas ideas. Ese proceso no solo produce las tropas de choques de la delirante derecha radical armada, sino también a creyentes convencidos encubiertos como Robert Ruben de Goldman Sachs, Hillary Clinton, Barack Obama, Tony Blair and Nancy Pelosi –individuos “decentes” que nunca han cuestionado la superioridad de la civilización occidental, que creen por completo en el derecho y responsabilidad del occidente blanco para determinar que naciones deberían tener soberanía y quien debería ser el líder de la naciones “inferiores”. Y quienes creen que no existe alternativa a las maravillas del capitalismo global aun si esto significa que miles de millones de seres humanos sean consignados permanentemente a lo que Fanon llamó ‘la zona del no ser’”.

Aquí, es importante destacar como la estructura del supremacismo blanco occidental a través de todas sus instituciones  como el FMI, el BM, y los grandes establecimientos de educación superior que funcionan como su base ideológica quedan inmunes a la critica que se encarga de desviar la atención hacia personajes como Donald Trump y los grupos supremacistas que, aunque detestables, apenas son una manifestación superficial del amplio y profundo espectro que abarca el poder hegemónico supremacista blanco en todos los espacios donde se manifiesta y el cual puede apreciarse en la violencia policial y el encarcelamiento masivo ejecutados contra miembros de las comunidades negras y otras de piel oscura, la deportaciones masivas de inmigrantes centroamericanos y mexicanos, y las guerras de exterminio en países como Somalia, Irak, Libia, Yemen, Afganistán y Siria, o las amenazas sobre Corea del Norte y Venezuela, o en el apoyo incondicional al régimen del apartheid que Israel practica contra los palestinos. Y aunque sean tan solo algunas de las manifestaciones que engrosan el amplio record de atrocidades que a lo largo de su historia han caracterizado al supremacismo blanco, nada de esto, en comparación con Charlottesville, genera la más mínima condena de liberales e izquierdistas por la sencilla razón que ambos son parte integral de la estructura del poder del supremacismo blanco que ha tendido sus tentáculos por todo el mundo minimizando y subyugando a los denominados como pueblos inferiores.


Segun John Wight (Counter Punch), “la afirmación de que los Estados Unidos tienen un problema con el supremacismo blanco es falsa. Es falsa porque los Estados Unidos es sinónimo con el supremacismo blanco; es una nación fundada y establecida por supremacistas blancos, cuya constitución fue redactada por supremacistas blancos, y en el que la supremacía blanca está anclada en el tejido social y cultural, sin olvidar sus propias instituciones”.






Publicado por La Cuna del Sol
USA. 

sábado, 26 de agosto de 2017

El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, va camino a perder su cargo

La caída del señor Jimmy Morales es inevitable en corto o mediano plazo porque sus apoyos o sustentaciones políticas y dinerarias están casi derruidas y descubiertas, lo que es peor. La irritación e indignación ciudadana es inmensa y va creciendo como la espuma ante el poco tacto político de un señor que casi invisibilizado en sus tropelías escogió la estrategia, el peor de los caminos; el de los pícaros y descarados que se ponen en la posición cínica de que ANTES DE QUE ME DIGAN, DIGO.


EL PRESIDENTE DE GUATEMALA, JIMMY MORALES,
VA CAMINO A PERDER SU CARGO


Por Luciano Castro Barillas

El seductor lema de campaña "ni corrupto, ni ladrón" del candidato presidencial de ese entonces, señor Jimmy Morales, por el partido político Frente de Convergencia Nacional, FCN, se desvirtuó a los pocos meses. Las promesas de impulsar una nueva manera de hacer política, basada en la ética, y por lo que la gente lo favoreció con el voto luego del espanto y debacle del binomio infernal Pérez-Baldetti; quedaron muy pronto en el olvido. Nadie, con un mínimo discernimiento, podía creer que una persona poco avezada en política, iba a ser quien dirigiera ese gobierno.

Las mafias empresariales tradicionales fueron paulatinamente relegadas ante la emergencia de capitales tenebrosos y peligrosos, como el de los narcotraficantes coludidos con las peores expresiones militares responsables de la sangrienta represión en los años más cruentos del conflicto armado interno de Gutemala. Se juntaban en un ejercicio aterrador asesinos de la intolerancia ideológica y política, con asesinos igualmente inescrupulosos y despiadados del tráfico internacional de drogas que daban el dinero y la "seguridad" en carros blindados, hombres e inteligencia. Las instituciones del Estado constituidas, pues, sustituidas, cooptadas, por la fuerza de poderes fácticos irresistibles a cualquier poder decente.

Es de puntualizar que la crisis política de Guatemala con la expulsión del poder de Pérez Molina no estaba, ni mucho menos, resuelta. En ese mar infestado de tiburones rapaces y de gran dentellada, prolijos y valientes bogaban y bogan el comisionado de Nacionaes Unidas, Iván Velásquez y la Fiscal General, señora Telma Aldana, que siendo electa por los círculos de la derecha y siendo ella misma de pensamiento altamente conservador, ante la atrocidad moral a la que se enfrenta, logra o se ve obligada a desmarcarse en resguardo de su honorabilidad personal y profesional. Se siguió investigando a los políticos y la política de Guatemala y cual Caja de Pandora de infinita profundidad, los demonios no acababan de salir. Uno tras otro, de una sentina impune y mal oliente que es la institucionalidad (si es que esas construcciones sociales republicanas guatemaltecas se les puede llamar así) de Guatemala, hasta llegar al actual presidente, Jimmy Morales, del cual hay indicios racionales de la comisión de ilícitos, por ello la razón de solicitar el retiro de la inmunidad que lo protege y poder averiguar con mayor amplitud y celeridad hasta donde, el que dijo que NO ERA NI CORRUPTO, NI LADRÓN, demuestre que no es corrupto, ni ladrón.


Su caída es inevitable porque en esa familia, al parecer, las prácticas de la sobrefacturación, la labia, el "evangelismo" y el ocultamiento es algo habitual. Nada insólito, tal el caso de Sammy, el hermano, y el joven hijo del presidente que no encontró en su tío un orientador, sino un avezado inductor de mañas, en un cuadro patético y digno de tomar en cuenta, como patetismo tenebroso italiano; donde tío y sobrino están en la cárcel y que podría ser peor: padre, hermano mayor y sobrino en donde no debieran de estar. Pobres al fin. La caída del señor Jimmy Morales es inevitable en corto o mediano plazo porque sus apoyos o sustentaciones políticas y dinerarias están casi derruidas y descubiertas, lo que es peor. La irritación e indignación ciudadana es inmensa y va creciendo como la espuma ante el poco tacto político de un señor que casi invisibilizado en sus tropelías escogió la estrategia, el peor de los caminos; el de los pícaros y descarados que se ponen en la posición cínica de que ANTES DE QUE ME DIGAN, DIGO. Ese fue el motivo de su viaje a Nueva York, donde, claro, no omitió a hablar de la CICIG, no exactamente como quería, porque la presión que se viene encima es descomunal, pero sí puntualizó que no se investigue la corrupción nacional!!!!, precisamente el mandato de la CICIG. Triste, sí, todo esto que le ocurre a la Nación Guatemalteca: nuevamente asomados a las precarias esperanzas de su futuro y nuevamente a tomar las calles para hacer valer sus derechos, exigir respeto y echar fuera a un presidente más.-






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

miércoles, 23 de agosto de 2017

Guatemala: Hospital Roosevelt, la guerra continúa

La violencia envuelve todo; también la respuesta inmediata que surgió: el pedido de pena de muerte. Aunque se fusilen unos cuantos mareros, ni la salud pública del Hospital Roosevelt mejorará, ni los asentamientos precarios desaparecerán. Y los corruptos de cuello blanco siguen saliendo impolutos de la cárcel. En otros términos: las causas que encendieron la guerra siguen presentes, por tanto, aunque con otra modalidad, la guerra continúa.


HOSPITAL ROOSEVELT:
LA GUERRA CONTINÚA


Por Marcelo Colussi

La reciente masacre del Hospital Roosevelt, con 7 muertos y una docena de heridos, es un fenómeno complejo que debe abordarse desde una multitud de aristas. Lecturas simplistas y opiniones viscerales no permiten entender realidades tan complicadas.

Una primera reacción –quizá la más generalizada– fue una mecánica y sentimentaloide respuesta violenta: ¡pena de muerte para los mareros! El hilo se corta siempre por lo más fino. Sin querer, en modo alguno, dulcificar o aminorar la conducta antisocial de los pandilleros que provocaron la masacre, lo importante es intentar entender el fenómeno en su totalidad. En ese sentido, entonces, los hechores materiales, los jóvenes que operaron las armas (¡por Q. 200!, según se dijo), son el último eslabón de una larga cadena.

Las maras, se sabe, son un síntoma social producto de una sociedad desgarrada, empobrecida hasta la médula y con una monstruosa historia de violencia a sus espaldas. Pero más desgarrador y patético que todo eso, es la utilización que pueden hacer de ellas los llamados “poderes ocultos”: grupos criminales que operan en el ámbito de una opaca dimensión política, enquistados en estructuras del Estado.

¿Por qué sucedió la matanza del Hospital Roosevelt? ¿Quién es el responsable? En todo caso, no hay “culpable” único: es una sumatoria de causas, histórico-estructurales en un caso, coyunturales en otro, interactuando todas. Quizá sería más útil preguntarse, dado que esto es un hecho que supera la mera crónica policial alcanzando ribetes políticos, si alguien se beneficia de todo esto. La población común, definitivamente no. ¿Habrá otros actores beneficiados?

Analizando acuciosamente los hechos, se encuentras más preguntas y dudas que respuestas convincentes. Por lo pronto, es preocupante encontrar que el reo finalmente rescatado fue trasladado al hospital para un examen de sangre. ¿Mala práctica o complicidad?

Sin la más mínima intención de apelar a teorías conspirativas (ese día casualmente se daba, al mismo tiempo de la matanza, el sobreseimiento del caso “Bufete de la impunidad”, quedando libres la magistrada Blanca Stalling y la ex directora del Hogar Seguro, Anahy Keller), hay datos que abren interrogantes. Quizá no haya vinculación entre ese sobreseimiento y lo que estaba sucediendo en el Hospital, pero sin dudas hechos de tal magnitud como lo sucedido en el Roosevelt no pueden entenderse solo como casualidades.

Lo cierto es que la violencia descontrolada continúa en el país, y eso, más allá de pomposas declaraciones, tiene una lógica. Tal violencia va de la mano de la corrupción y la impunidad reinante. La “ineficiencia” del Estado –que, sin dudas, la hay– es un corolario de esa corrupción e impunidad. Enviar un preso a un hospital público solo para un estudio hematológico es una expresión de todo ese paquete: ¿ineficiencia, corrupción, Estado debilitado? Se había dicho que eso no volvería a suceder, teniendo en cuenta anteriores experiencias (una matanza similar en el Hospital San Juan de Dios). ¿Por qué sucedió? Es evidente que la satisfacción de la población es lo que menos interesa. ¿Sucedería esto en un hospital privado de jerarquía? ¿No es posible atender una situación similar en la Enfermería del centro carcelario?

Resulta significativo también, y refuerza la situación de corrupción e impunidad –que no es sino otra forma de demostrar la violencia en que seguimos viviendo– el cómo puede operar un grupo criminal. Eso evidencia la catástrofe social que nos envuelve. ¿Quién puede matar por encargo por 200 quetzales? ¿Qué opción tiene un joven de las (mal llamadas) “zonas rojas”? Sobrevivir penosamente –si consigue trabajo–, emigrar de ilegal, ¿o la mara? Es cierto que no todo joven de estas zonas ingresa a una pandilla (contrariando el prejuicioso mito dominante), pero la puerta para la transgresión está siempre abierta (recordemos que personas que no vienen de “barrios marginales” también transgreden, pero por vericuetos de la ¿politiquería?, al mismo tiempo de la masacre estaban saliendo en libertad en la Torre de Tribunales). La desesperación social reinante (la catástrofe humana latente, podría decirse) permite que por 200 quetzales se pueda ir a matar.

La violencia, la cultura de muerte, el desprecio por el otro están enraizadas en la historia del país. Los 245,000 muertos de la guerra son una pesada y no procesada herencia que aún cuenta mucho. La impunidad que se desprende de eso (¿quién se hace responsable de tanto crimen?) marca la historia. A partir de la pobreza crónica y esa impunidad, es que puede haber maras que desprecian la vida, y por unos pocos pesos matan a discreción.

La violencia envuelve todo; también la respuesta inmediata que surgió: el pedido de pena de muerte. Aunque se fusilen unos cuantos mareros, ni la salud pública del Hospital Roosevelt mejorará, ni los asentamientos precarios desaparecerán. Y los corruptos de cuello blanco siguen saliendo impolutos de la cárcel. En otros términos: las causas que encendieron la guerra siguen presentes, por tanto, aunque con otra modalidad, la guerra continúa.






Publicado por La Cuna del Sol
USA. 

lunes, 21 de agosto de 2017

El fútbol como manifestación de la universalidad de los intereses egoístas

Messi, Ronaldo y Neymar producen dentro de la sociedad, como individuos sociales; solo son lo que son en sociedad, fuera de ella no son nada. Dejados a su merced, en una isla abandonada, no sabrían incluso que pudiera existir algo llamado fútbol. Pero en la sociedad en la que vivimos, dominada por el sistema capitalista, sistema enajenador donde los haya, este carácter social de sus personalidades se presenta como un medio para objetivar su individualidad. Y en vez de mostrar su reconocimiento a la sociedad que los ha creado, Messi, Neymar y Ronaldo invierten la relación, exigiendo a la sociedad que agradezcan la existencia de su individualidad y de su actividad, como si lo que produjeran fuera fruto del aspecto privado de su individualidad y no de su aspecto social.


EL FÚTBOL COMO MANIFESTACIÓN DE LA
UNIVERSALIDAD DE LOS INTERESES EGOÍSTAS


Por Francisco Umpiérrez Sanchéz

“El interés general o común no es cabalmente otra cosa que la universalidad de los intereses egoístas”. Karl Marx.

El imperio del mercado es el imperio del valor de cambio. Y el valor de cambio es la manifestación de la división del trabajo. Y la división del trabajo concebida como interrelación e interdependencia significa que todos dependemos de todos, que todos trabajamos para todos, que todos satisfacemos las necesidades ajenas. Pero esta división del trabajo está organizada de modo capitalista, de modo que en esto de todos trabajamos para todos hay algunos que se llevan mucho más de lo que entregan. Los futbolistas de élite trabajan para los demás, producen un espectáculo que satisface las necesidades de entretenimiento y enajenación de la gente, pero ingresan a cambio demasiado dinero. Eso implica que muchos trabajan para ellos o entregan a cambio más de lo que reciben. Uno de los secretos del enriquecimiento de los futbolistas de élite está en el modo de consumo, el hecho de que un solo producto, un partido de fútbol,  pueda ser consumido de forma simultánea por millones de personas. Pero en el fútbol todo lo irracional e injusto se ha vuelto natural. El traspaso de Neymar al PSG ha costado 220 millones de euros y el propio Neymar ganará anualmente 30 millones de euros. Nadie se asombra y nadie hace nada, ni la izquierda llamada radical, que de continuo equivoca sus blancos. Y la gente en general, dominada por la ideología capitalista, admira la extrema riqueza y el exorbitante lujo. Sueñan con ese mundo. Desean ese mundo. Pero para eso está el Estado, la autoconciencia humana objetivada, para poner remedio a aquello que de modo natural produce enormes perjuicios a las mayorías sociales. Así que como un solo partido de fútbol es consumido por millones de personas, el Estado puede hacer dos cosas: obligar a que la emisión de los partidos de fútbol sea gratis o imponer una carga impositiva del 90 por ciento a los ingresos de los clubes por los derechos televisivos.


Algunos se preguntan: ¿Quién decide el sueldo de Neymar? Y los más listos, los que están en los pupitres de delante de la clase, dicen con aparente seso: el mercado. Así el mercado, donde vendedores y compradores se encuentran, se transforma en una persona que toma decisiones. Ese tipo de respuesta, la afirmación de que es el mercado quien decide los precios, pone de manifiesto que la persona que da esa respuesta está enajenada, trata como a una persona lo que es el resultado de las relaciones de millones de  personas en estado de enajenación, esto es, en estado de no controlar la relación social que han creado. Por eso es importante el Estado, para que hable, actúe y represente los intereses de los millones de consumidores del fútbol, y no que solo hablen los clubes de futbol y las cadenas de televisión. Si el mercado es una relación entre personas, dichas personas pueden decidir tener un mercado más justo, esto es,  más socialista y menos capitalista.  Si tenemos una educación y sanidad públicas, y esto genera tantos beneficios sociales que cualquier gran empresa lo considera un requisito imprescindible en sus inversiones, ¿por qué el entretenimiento futbolístico de las grandes masas tienen que estar en manos de crueles explotadores?

Pero hay más sabios. Son aquellos que dicen que el PSG rentabilizará la compra de los servicios de Neymar. Argumentan que ha sido “el genio” de Florentino Pérez  quien ha visto en la publicidad y en la venta de camisetas la fuente de la enorme riqueza de los grandes clubes de Europa. Y así con esos ingentes ingresos por publicidad, ventas de camisetas y derechos televisivos, las principales figuras del fútbol mundial se han transformado en dioses, en seres intocables, que rezuman riqueza y poder por todos los poros. Pero habría que acabar con ellos, bajarlos del pedestal, convertirlos en personas corrientes; y eso solo se lograría superando al enajenación mercantil capitalista, esto es, hablando del mercado no como una cosa dotada de voluntad sino como un encuentro entre seres humanos unidos por la división del trabajo y donde nadie se debería llevar demasiado, donde el esfuerzo y trabajo de uno como es el caso de Ronaldo y Messi,  no pueda equivaler al esfuerzo y trabajo de un millón de personas que vivan del salario base. Los precios de las camisetas, al ser precios de monopolio, deberían ser precios intervenidos por el Estado, y los contratos de publicidad, que permiten a los Messi y Ronaldo ingresar injustamente  grandes sumas de dinero, también tendrían que ser intervenidos por el Estado. El 90 por ciento de esos ingresos deberían ser de propiedad pública. Y si esto se lograra a nivel europeo, e incluso a nivel mundial, los futbolistas no se convertirían en dioses engreídos y extremadamente egoístas. Aquí hablamos del egoísmo capitalista y no del egoísmo a secas. El egoísmo a secas significa que una persona piensa más en sí mismo que en los demás, mientras que el egoísmo capitalista significa que una persona se apropia para sí lo que es fruto de los demás. Lo que sucede es que este fenómeno, que una persona use en beneficio propio los frutos y conquistas sociales, es normal y legal en el sistema capitalista. Y la mentalidad capitalista es de sobra la mentalidad dominante en el mundo.

Pero alejémonos de los periodistas y empresarios que viven la enajenación positiva y que no son más que unos apologistas de un sistema generador de injusticias, desigualdades y cruel explotación de masas, vayamos al encuentro de aire limpio y ganemos en visión profunda y transcendental. Recurramos a Marx, como hacemos siempre que necesitamos descubrir la esencia del capitalismo y de la economía mercantil, vayamos a sus Grundrisse. Y allí, en la sección titulada ¿Cómo se manifiesta la ley de la apropiación en la circulación simple?, escuchemos sus sabias y poderosas palabras. Se pregunta Marx: “¿Cómo comprueba el individuo que su trabajo privado es un trabajo general y su producto un producto social general?” Y responde: “Por el contenido particular de su trabajo, del valor de uso particular de éste, que es objeto de la necesidad de otro individuo, el cual ofrece a cambio de él, como equivalente, su propio producto. Es decir, por el hecho de que su trabajo representa una particularidad dentro de la totalidad del trabajo social, una rama particular que lo complementa”. Aquí se manifiesta el carácter profundamente dialéctico del pensamiento de Marx. ¿Cómo compruebo que mi trabajo privado es un trabajo general? Por la particularidad, esto es, por la particularidad confirmo lo contrario de la particularidad: la generalidad. Y esto es así porque aquí lo general significa totalidad. Y el fútbol es solo una rama particular del trabajo, no la totalidad. Los futbolistas solo nos satisfacen una necesidad, no la totalidad de las necesidades. Pero hay más, no nos satisfacen una necesidad básica ni una necesidad fundamental, sin embargo, esta rama del trabajo, la actividad futbolística, se ha enseñoreado sobre la población y hemos dejado que así suceda. Ronaldo, Messi y Neymar necesitan del trabajo de los demás, necesitan de la totalidad del trabajo social, sin los cuales no podrían realizar su vida. Pero sucede que el trabajo social al tener forma capitalista ha permitido que estos individuos se enseñoreen sobre la sociedad y la explote. Así se expresa Marx en torno a esta dialéctica del trabajo social: “Solo produzco para mí al producir para la sociedad, cada uno de cuyos miembros trabaja, a su vez, para mí en otro círculo”.

Marx, más adelante, dice algo decisivo: “Los individuos producen dentro de la sociedad y para ella, como individuos sociales, pero al mismo tiempo esto se revela simplemente como un medio para objetivar su individualidad. Y como no se hallan circunscrito dentro de una comunidad natural ni, por otra parte, encuadran la comunidad como algo conscientemente común, necesariamente tiene que existir frente a los sujetos independientes como algo también independiente, externo y fortuito, como algo que existe frente a ellos en forma de cosas”. Esta cosa es el valor de cambio o dinero. Y ahora aclaro: Messi, Ronaldo y Neymar producen dentro de la sociedad, como individuos sociales; solo son lo que son en sociedad, fuera de ella no son nada. Dejados a su merced, en una isla abandonada, no sabrían incluso que pudiera existir algo llamado fútbol. Pero en la sociedad en la que vivimos, dominada por el sistema capitalista, sistema enajenador donde los haya, este carácter social de sus personalidades se presenta como un medio para objetivar su individualidad. Y en vez de mostrar su reconocimiento a la sociedad que los ha creado, Messi, Neymar y Ronaldo invierten la relación, exigiendo a la sociedad que agradezcan la existencia de su individualidad y de su actividad, como si lo que produjeran fuera fruto del aspecto privado de su individualidad y no de su aspecto social. El problema es que Messi, Neymar y Ronaldo no tienen conciencia de comunidad, no saben que lo que son lo son por la comunidad, y en vez de mostrar su agradecimiento a la comunidad la toman como medio para objetivar su individualidad. Puro endiosamiento.

Todos somos distintos porque todos realizamos trabajos distintos para satisfacer la necesidad social. Pero todos medimos nuestro esfuerzo con algo externo y común: el dinero. Todos los esfuerzos y los trabajos se hacen iguales en tanto se expresan en dinero. El dinero es la expresión de nuestro ser social, nuestro ser social objetivado, el valor de cambio desarrollado, la manifestación como cosa tangible de la enorme y rica división del trabajo. Pero por la forma capitalista de la producción sucede que hay personas como Messi y Ronaldo que su trabajo de un año se cambia por el trabajo de un millón de trabajadores que viven del salario mínimo. La totalidad, la rica división del trabajo social, aquello mediante lo cual podemos vivir de una manera plena y variada, se convierte gracias a su forma capitalista en un cruel sistema de explotación, donde unos pocos se apropian de ingentes cantidades de riqueza mientras los muchos apenas satisfacen sus necesidades básicas.


Pensemos en Nasser Al-Khelaïfi, presidente del PSG y de BeIN Sports, uno de las 100 personas más ricas del mundo, con un patrimonio valorado en 16.000 millones de euros, con el brazo por encima de Neymar, comentándole: Nos has costado muchísimo dinero, pero serás la estrella del PSG y tal vez, que digo tal vez, seguro que serás el mejor jugador del mundo en dos o tres años, tus camisetas valdrán oro, tus contratos publicitarios también valdrán oro, así que tú mismo te harás de oro. Piensa que el mercado mundial está a nuestros pies, la actividad futbolística no cesa de crecer, y la alianza entre los clubes de futbol, las cadenas televisivas y las grandes compañías por medio de la publicidad cada día es más fuerte. El Estado no podrá nada contra nosotros. Sabes que los políticos, con sueldos de mierda, viven bajo la tentación y las picaduras de la corrupción, y no son bien vistos por los ciudadanos. Así que no podemos temerles. Debemos olvidarnos de ellos e ir a lo nuestro. Piensa en la siguiente imagen: contempla un pueblo pobre y arrasado por la guerra; así y todo verás a los niños jugando al fútbol; y qué no daría un niño como ese por tener una camiseta de Neymar. ¡¿Qué me dices?! Hay que pensar en grande. Hay que ver negocio en todo. Así que alégrate. De todas las enajenaciones de masas la futbolística es la más poderosa. ¡El mundo es nuestro!






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

sábado, 19 de agosto de 2017

¿Qué es la democracia para el régimen estadounidense?

La democracia para el régimen estadounidense es un sistema donde las élites deben poseer el control económico, político, social, humano, de una nación.


¿QUÉ ES LA DEMOCRACIA PARA EL
RÉGIMEN ESTADOUNIDENSE?


Por Carlos Santa María

La democracia para el régimen estadounidense es un sistema donde las élites deben poseer el control económico, político, social, humano, de una nación.

Una nación, que funciona acorde con los principios de la Corporatocracia o directorio transnacional propietario de gran parte del planeta (o del todo si fuese posible), basado en un Orden Mundial obligatorio.

Los fundamentos de esta Corporación que domina el gobierno de numerosas naciones, iniciando por EE.UU., Inglaterra, Francia, Arabia Saudí, Rumania, Polonia, varios países latinoamericanos simbolizados por México, entre otros, son cuatro básicamente: 1, poseer todas las riquezas naturales del mundo; 2, castigar a quien se oponga a sus designios; 3, provocar una guerra mundial si es necesario; 4, romper todo asomo de libertad real en cada nación que desafíe sus propósitos imperiales.

Por tanto, son naciones “democráticas” aquellas cuyo gobierno acepta sin contemplaciones vender todas sus riquezas naturales, inclinarse ante dichas autoridades, actuar bajo su influjo, entregar los pueblos para su domesticación.

Cabe reconocer en la Cleptocracia, nombre por el cual también se conoce esta élite, una altísima capacidad de presionar y concientizar a grandes masas de población de que su propuesta es la mejor y, a su vez, sea desconocida en esencia. Debe ser admitida su habilidad para potencializar a individuos con una alta dosis de entrega, que tomen el poder político, militar, religioso, infraestructural, para dicha función.

Son labores de una democracia así enfocada las siguientes:

1. Demoler todo gobierno soberano, al no reconocer las elecciones presidenciales cuando gana un candidato que no es de su afecto, calificarlo como dictadura con el fin de enervar el sentimiento anticomunista, desestabilizarlo hasta el extremo sin importar los pueblos. Las verdaderas dictaduras y la violencia son consideradas democráticas: el caso de Chile en la época de Allende, la oposición en Venezuela, Ucrania, la agresión a Irán, son la confirmación clara. Cuando hay violencia para regresar al sistema capitalista es definido como libertad, es decir, asesinar es válido.

2. Los asuntos internos de todo país son su objetivo…menos los suyos o de sus aliados. El analista Luis Casado manifiesta datos concretos, desconocidos por la opinión pública: según el Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés), en el año 2014 hubo en los EE.UU. 8 mil 124 muertes por disparos de armas de fuego y, según el New York Times, la tasa de homicidios cometidos con armas de fuego es de 31 por cada millón de habitantes, el equivalente de 27 personas asesinadas cada día. México, país controlado por el narcotráfico, tuvo 1.938 homicidios solo en el mes de enero 2017. El caso del banco HSBC, modelo de impunidad, tenía presencia en 75 países, declaraba 54 millones de clientes, colaborando con los carteles de la droga de México y Colombia, blanqueando unos 880 mil millones de dólares. Esto es democracia, así como el “plebiscito” en Venezuela organizado por la oposición, aunque la elección de la Asamblea Nacional Constituyente bajo supervisión técnica y legal no fue reconocida. 

3. La desestabilización como herramienta.

El estímulo al odio, la frustración, la negación del pensamiento o la lógica, apelar al sentimiento por sobre la razón, se ven refrendados en el mensaje de la Casa Blanca a su embajada en Venezuela para retirar a todos los familiares y, a su vez, la orden dada a aerolíneas extranjeras de suspender sus viajes a dicha nación, con el fin de crear un ambiente de guerra civil.

Ello ha llevado a que las fuerzas estadounidenses en el planeta no sean vistas como adalides de la libertad ya que hoy se habla de cobardía y provocación, lo que determina el aumento en la percepción negativa de dichas fuerzas.

A pesar de no haber ninguna resolución de la ONU que permita una intervención en Siria, ni permiso del gobierno para desplegar comandos sobre el terreno, ni apoyar a grupos armados al margen de la ley, USA está quebrantando una vez más la credibilidad de las instituciones internacionales obrando la margen de la legislación aprobada. Estimular a grupos terroristas como Daesh y Al-Qaeda es un principio supuestamente democrático.

4. Guerra de cuarta generación: ocultar y engañar a los pueblos.

Es “libertad de información” que la empresa privada tenga el 100% de los Medios o posea el control estatal de la comunicación. Así, mentir es un postulado fundamental, demostrado en la información dada por Infobae donde reconocían un 12,4% de la votación en Venezuela siendo que era de 41%. Al tener multitud de comentarios sobre la falsificación dada fue borrada de la página principal. El caso de Argentina, donde los controladores de la votación PASO fueron enviados a sus hogares para no conocer los verdaderos resultados, es diciente. Cuando Mike Pence dice que intervendrán militarmente, la prensa calla y no condena dicha “justicia”.

5. Defender a personas que representen sus intereses, otorgando el país como refugio.

La democracia significa proteger a todos los líderes golpistas y sanguinarios del mundo para darles oportunidad de maniobra. La historia es interminable: el criminal Sha de Irán, Reza Pahlavi, Fethulá Gülen de Turquía, Luis Posada Carriles, agente de la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, en inglés), Foley (asesino de Orlando Letelier), a ladrones perseguidos por la justicia internacional. Actualmente es la persecución a narcos de gran valor económico con el fin de apoderarse de sus riquezas y la protección a golpistas venezolanos como Ramón Muchacho... todo en aras de la libertad.

En síntesis, la gente honesta y valiente del planeta no puede compartir tal concepto de democracia por su deformación y peligro que entraña para la humanidad. Lo que exige la gente consciente del planeta es que el régimen estadounidense se dedique a resolver sus propios problemas internos, entre ellos, la deuda económica verdadera y política más grande del mundo: cerca de 20 billones de dólares y millones de seres humanos asesinados.


El mandato ético es que dicho régimen resuelva sus propios problemas de coacción, de racismo, de asesinatos, de desaparecidos, de guerras e intervención en otros estados, etc. Lo primero que debe hacer todo ciudadano inteligente es desconfiar de palabras que frecuentemente se escuchan y ven en los Medios afiliados a la Corporatocracia: libertad, democracia, paz, sólo son válidas cuando expresan la equidad y justicia para el mundo.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

miércoles, 16 de agosto de 2017

El narcotráfico en México es clase gobernante

El clan Salinas es acaso el referente más emblemático del poder político en México. Durante esa administración, el cártel del Golfo alcanzó una posición dominante en el universo del narcotráfico en México, prohijado por el blindaje institucional de la familia presidencial.


EL NARCOTRÁFICO EN MÉXICO
ES CLASE GOBERNANTE


Por Arsinoé Orihuela Ochoa

En México y el extranjero es común que el público pregunte por qué en este país matan a los periodistas, desparecen a los estudiantes, reprimen hasta la muerte a los maestros, asesinan a líderes comunales, persiguen con ferocidad a defensores de derechos humanos, ejecutan a centenares de miles de civiles inocentes etc. La respuesta con frecuencia acude al estribillo: “fue el narcotráfico”. Esta especie de “hipótesis” inoculada, basada en información filtrada inconexamente por la prensa, aunque es parcialmente cierta, tiene limitaciones u omisiones que conviene señalar.

Una primera limitación (subjetiva) es que alimenta la creencia fetichizada de que el narcotráfico es un “agente balcanizador” que las fuerzas del Estado no consiguen domeñar o contener por impotencia o debilidad. Esta “creencia” desliza (subterráneamente) la falsa noción de que la sola participación-intervención de las instituciones significa, a priori o exprofeso, un freno a las formas ilegales de hacer negocios o política, que es una tesis que (al menos en México) no resiste el menor análisis.

Esto remite a la segunda omisión (objetiva): a saber, que en México la presencia de actores institucionales de alto rango es una constante en la ecuación de los negocios del narcotráfico. Casi por regla, las corporaciones de seguridad han estado dirigidas por civiles o militares sobre cuyas personas recaen sospechas de colusión (algunas probadas) con la delincuencia organizada, particularmente el narcotráfico: Miguel Nazar Haro, Mario Arturo Acosta Chaparro, Francisco Sahagún Baca, Jorge Maldonado Vega, Jesús Gutiérrez Rebollo, Oralio Castro Aparicio, Rafael Macedo de la Concha, Genaro García Luna, por mencionar algunos.

Y, por si esto fuera poco, sólo en el curso de la administración de Enrique Peña Nieto al menos 16 exgobernadores han sido acusados (unos detenidos otros prófugos de la justica) por numerosos delitos que involucran asociación ilícita con el narcotráfico: Roberto Borge (Quintana Roo); Javier Duarte de Ochoa (Veracruz); Flavino Ríos (Veracruz); Tomás Yarrington (Tamaulipas); Egidio Torre Cantú (Tamaulipas); Eugenio Hernández (Tamaulipas); Guillermo Padrés (Sonora); Luis Armando Reynoso Femat (Aguascalientes); Jesús Reina García (Michoacán); Fausto Vallejo (Michoacán); Humberto Moreira (Coahuila); Rubén Moreira (Coahuila); Rodrigo Medina (Nuevo León); Miguel Alonso Reyes (Zacatecas); Ángel Aguirre Rivero (Guerrero); Andrés Granier Melo (Tabasco).

Hay que recordar que algunos de estos exgobernadores forman parte de esa “flamante” generación política que el actual presidente, Enrique Peña Nieto, presentó como fieles representantes del “nuevo PRI” (Partido Revolucionario Institucional). Y tenía razón respecto a la fiel “representatividad” de estos personajes. Únicamente se equivocó al sugerir que se trataba de un nuevo viento.

Si no recuérdese el turbulento sexenio de Carlos Salinas de Gortari. El clan Salinas es acaso el referente más emblemático del poder político en México. Durante esa administración, el cártel del Golfo alcanzó una posición dominante en el universo del narcotráfico en México, prohijado por el blindaje institucional de la familia presidencial. Juan Nepomuceno Guerra, el fundador del cártel, era compadre de Raúl Salinas Lozano, padre de Carlos, el expresidente, y de Raúl Jr., el criminosamente célebre “hermano incómodo”, quien, por cierto, paso diez años en la cárcel (1995-2005) por el asesinato de su ex cuñado José Francisco Ruiz Massieu, y por otros delitos tales como lavado de dinero, enriquecimiento ilícito, nexos con el narcotráfico etc.

En 1999, un informe suizo ratificó estos contubernios delictuosos del clan Salinas: “Ya desde finales de la década de los setenta, los hermanos Carlos y Raúl Salinas de Gortari fueron introducidos en el negocio de las drogas por su padre Raúl Salinas Lozano, quien hubiese visto con más agrado a Raúl a la cabeza del Estado en México; sin embargo, se decidió a darle el apoyo necesario a su hijo Carlos, debido a que el modo de vida no loable de Raúl no le hubiese permitido ocupar un alto cargo en la política” (Proceso, 30-I-1999).

Dos años antes (1997), la procuradora de Suiza, Carla del Ponte, presentó un reporte que detallaba las conexiones de políticos mexicanos con la delincuencia organizada. De acuerdo con el testimonio de un informante protegido del cártel de Cali, en 1990 se celebró una reunión en México con diversos jefes criminales a la que acudieron “Arturo Acosta Chaparro, Francisco Quiroz Hermosillo, Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa Patrón y José María Córdoba Montoya” (sinembargo.mx 7-VIII-2015). Éste último fue el más cercano asesor de Carlos Salinas durante su mandato.

En 1997, Manlio Fabio Beltrones Rivera fue acusado por la DEA en Estados Unidos de brindar protección al cártel de Juárez de Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”. De acuerdo con el informe suizo antes referido, Emilio Gamboa Patrón negoció con el cártel del Golfo los 114 millones de dólares que fueron depositados a nombre de Raúl Salinas de Gortari en la banca de Suiza (ibidem). En la actualidad, Beltrones Rivera es el presidente del PRI, y Gamboa Patrón es el coordinador de la bancada priísta en el Senado.

Por último, una tercera omisión (también objetiva) en la que incurre aquel estribillo de “fue el narco” es que en México prevalece una tasa de impunidad de 95-100% respecto a todas las modalidades de delito (con minúsculas variaciones en las distintas entidades federativas); una cifra que, por sí sóla, da cuenta de un éxito formidable, en donde el objetivo de las instituciones no puede ser la justicia sino la impunidad.

En este sentido, la pregunta no es por qué México reporta estadísticas humanamente impresentables. Hasta un adolescente entiende que el “imperio de la ley” de “plata o plomo”, que es la ley del narcotráfico, comporta escenarios de terror, muerte y destrucción a gran escala.


La pregunta que urge formular en México es por qué el narcotráfico en México es clase gobernante.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

sábado, 12 de agosto de 2017

Sanciones: Las elites occidentales intentan desesperadamente mantener su hegemonía

Todas las estrategias que implican emprender una guerra económica contra Rusia a través de sanciones probablemente se desarrollaron de manera detallada en 2007, después de que Putin pronunció su discurso sobre el "mundo multipolar" en Munich. Ahora las elites de los Estados Unidos simplemente buscan pretextos para implementar esas sanciones.

SANCIONES: LAS ELITES OCCIDENTALES INTENTAN
DESESPERADAMENTE MANTENER SU HEGEMONÍA


Por Denis Churilov

El miércoles 2 de agosto, Trump firmó un proyecto de ley que amplía las sanciones económicas en contra de Rusia. Sanciones que fueron votadas previamente por el Congreso para "castigar al gobierno ruso por la interferencia en las elecciones presidenciales de 2016". Nadie se molestó en proporcionar algún tipo de prueba de que Rusia, de hecho, interfirió en la elección abiertamente. Todo el mundo ha estado tratando de esgrimir un argumento (un argumento falso), simplemente apelando a la autoridad y refiriéndose a las conclusiones supuestamente alcanzadas por las agencias de inteligencia, con los medios de comunicación tradicionales propagando maniáticamente la histeria anti-Rusia sin ningún fundamento. Esa es una imagen muy similar a lo que vimos en 2003 con las míticas armas de destrucción masiva de Saddam. En aquel entonces, tal propaganda sirvió para crear el pretexto para la invasión estadounidense de Irak.

Veamos ahora el último paquete de sanciones desde una perspectiva histórica y geopolítica más amplia.

Hace diez años, Putin pronuncio su histórico discurso en la Conferencia de Seguridad de Munich de 2007. En su discurso, criticó el actual orden mundial unipolar, expresando, entre otras cosas, que Estados Unidos ha "sobrepasado sus fronteras nacionales en todos los sentidos", dictando repetidamente a otros cómo deben construir sus políticas económicas, políticas, culturales y educativas. Putin criticó a los Estados Unidos por su tendencia a resolver cuestiones no de acuerdo con el derecho internacional, sino de acuerdo a sus intereses políticos inmediatos. Putin también criticó a la OTAN por su expansionismo militar (que ha ido en contra del Tratado de 1999 de las Fuerzas Armadas Convencionales en Europa) y criticó ferozmente el programa de misiles estadounidense en Europa. Hizo un llamado para desarrollar un modelo mundial multipolar y afirmó que Rusia siempre conducirá su política de manera independiente.

Las elites transatlánticas/norte-atlánticas no quedaron satisfechas con esas declaraciones que Putin hiciera. Las reacciones de los funcionarios occidentales lo confirmaban. Como tal, el entonces Secretario General de la OTAN, Jap de Hoop Scheffer, calificó el discurso de Putin de "decepcionante". El senador estadounidense John McCain (quien era candidato presidencial) dijo que "Moscú debe entender que no puede gozar de una asociación genuina con Occidente mientras sus acciones en el país y en el extranjero  estén en un conflicto tan fundamental con los ancestrales valores fundamentales de las democracias euro-atlánticas" (sí, no eres democrático si piensas de otra manera y si no haces lo que los EE.UU te dicta que hagas).

Muchos consideran el discurso de Putin de 2007, como un punto de partida de una nueva Guerra Fría. Sería razonable suponer que las élites estadounidenses comenzaron a desarrollar estrategias complejas sobre cómo socavar a Rusia con un objetivo a medio plazo para restringirla geopolíticamente, agotándola de cualquier medio para defender sus intereses nacionales, y luego, a largo plazo , acabar con el país, dividirlo en un par de estados más pequeños que podrían ser fácilmente controlados (con la OTAN / Estados Unidos poniendo las manos sobre el arsenal nuclear ruso) para resolver el problema del "factor ruso" de una vez por todas.

Según sabemos de la historia de la Guerra Fría original, tal planificación a largo plazo siempre implica una combinación compleja de medidas en la guerra económica, social, psicológica/propaganda y convencional.

Ellos intentaron evitar que Putin volviera al poder en 2011-2012, orquestando un cambio de régimen "liberal" de acuerdo con las técnicas de "revolución del color", en medio de las elecciones presidenciales de 2012. Ellos fracasaron en ese entonces, por dos razones principales. En primer lugar, no podían lograr mucho debido a la abominable impotencia intelectual de la oposición "no-sistémica" "liberal" que escogieron apoyar (aquellos que fueron asignados a esa tarea, por ejemplo, el ahora ex embajador de EE.UU. en Rusia, Michael McFaul, tampoco resultaron ser muy brillantes). Y, en segundo lugar, había algunas fuerzas políticas no gubernamentales en Rusia en ese entonces (por ejemplo, el movimiento  Esencia del Tiempo, o Essence of Time, de Kurginyan) que entendían lo que estaba pasando y empezaron a jugar su propio juego, frustrando posteriormente los planes de la "revolución de color".

Para disgusto de las elites transatlánticas (y particularmente las estadounidenses), Putin volvió a ser presidente de nuevo en 2012.

Todo se agravó significativamente en 2013, cuando Putin rompió los planes estratégicos de Estados Unidos al impedir que Obama invadiera Siria (un rápido recordatorio de lo que estaba sucediendo en ese entonces: Assad fue acusado de atacar con gases a su propia gente, académicos del MIT y múltiples investigadores independientes resaltaban las inconsistencias en la historia de los hechos, sugiriendo que podría haber sido un ataque de falsa bandera, pero los diplomáticos estadounidenses y los principales medios de comunicación no demostraron ningún interés  y estaban preparando activamente el público para otra guerra, luego Rusia y China entraron en juego, con Putin proponiendo un acuerdo diplomático según el cual, el gobierno sirio abandonaría todas sus armas químicas existentes, de modo que las armas pudieran ser eliminadas bajo la supervisión de una comisión internacional especialmente formada. Obama no podía hacer otra cosa que estar de acuerdo). Rusia actuando como un protagonista global en el Medio Oriente fue el punto de inflexión que enfureció a los actores transatlánticos. Eso era algo que no podían tolerar.

Como resultado, a finales del año, en el período comprendido entre noviembre de 2013 y febrero de 2014, Rusia fue retribuida con el golpe del Euromaidan en Kiev y la posterior crisis de Ucrania.

He cubierto la crisis de Ucrania sustancialmente en el pasado, mostrando su mecánica y cómo los medios de difusión occidentales la han propagado, de la manera orwelliana, como una especie de "agresión rusa".

Cabe señalar que poco antes del cambio de régimen en Kiev, en octubre de 2013, Henry Kissinger realizó una visita oficial a Moscú, donde mantuvo conversaciones con Putin. El contenido exacto de la reunión sigue siendo un tema de especulaciones, pero, dado el clima político en general, es razonable suponer que Kissinger le estaba ofreciendo a Putin una manera de salir de la inminente crisis ucraniana al renunciar a la postura de Rusia sobre Siria.

Uno debe tener en cuenta los intereses de Rusia en Siria para poder comprender los juegos geopolíticos actuales en la región. En resumen, Rusia tiene dos grandes intereses en Siria: corporativo-económico y seguridad. Si el gobierno sirio cae, el gobierno de Qatar podría poner en marcha su gasoducto a Europa a través del territorio sirio (de ahí que hayan estado financiando y armando a los yihadistas contra el presidente Assad). Eso comprometería los intereses del gobierno ruso en general y los intereses de  la empresa  Gazprom en particular, que obtienen beneficios de la venta de gas natural a los estados de la UE. Qatar es un potencial competidor de Gazprom, por lo que tanto los intereses económicos nacionales como empresariales de Rusia coinciden en el caso de Siria.

Y también hay un interés vital de seguridad, que concierne no sólo a las corporaciones rusas, sino a Rusia en su conjunto, con todo su pueblo: si los yihadistas triunfan y el gobierno sirio es derrocado por los militantes wahabíes (como ocurrió anteriormente en Libia) , es probable que toda la región se hunda en el caos, proporcionando un terreno fértil para la formación de un cuasi califato fundamentalista, que luego se extenderá al Cáucaso y la región de Asia Central, desestabilizando a los estados locales, desde donde será capaz de librar una guerra terrorista contra Rusia y China (Rusia tuvo suficientes problemas con los islamistas durante las dos guerras de Chechenia en los años 1990, y China ha estado teniendo problemas con extremistas islámicos uigures en la región noroccidental de Xinjiang durante siglos, por lo que ambas potencias tienen regiones inestables que podrían ser explotadas por sus rivales geopolíticos). Eso, por cierto, explica por qué tanto Rusia como China están interesados ​​en la estabilidad en el Medio Oriente. Estados Unidos, por el contrario, quiere lo opuesto: desestabilizar la región eurasiática para socavar a los competidores y seguir siendo la única superpotencia del mundo.

Por lo tanto, parece que Putin correctamente se negó a someterse al ultimátum emitido por Kissinger (si realmente estaban discutiendo estas cuestiones) a finales de 2013 y continuó con su política hacia Siria, finalmente ampliando la cooperación antiterrorista con Assad, iniciando una operación militar Involucrando a las Fuerzas Aeroespaciales rusas en septiembre de 2015.

En pocas palabras, las grandes élites transatlánticas, los neoconservadores norteamericanos y otros "halcones" odian a Rusia porque la ven como una amenaza a su dominio global y, por lo tanto, tratan constantemente de socavarla y destruirla.

Todas las estrategias que implican emprender una guerra económica contra Rusia a través de sanciones probablemente se desarrollaron de manera detallada en 2007, después de que Putin pronunció su discurso sobre el "mundo multipolar" en Munich. Ahora las elites de los Estados Unidos simplemente buscan pretextos para implementar esas sanciones. Todas las "interferencias electorales rusas", "hackers rusos" y tonterías similares, son sólo una excusa formal para ratificar esas sanciones. A ellos no les importa la ideología. No les importan los principios, la democracia, la libertad o lo que se pueda imaginar (si les importara, no estarían en la cama con el régimen saudí que decapita a la gente por "brujería"). Ellos solo quieren mantener su dominio global.

Pero son incapaces de ser los número uno del mundo solo por ser los mejores en todo, por lo que optan, para mantenerse en lo más alto, derribar a todos los demás, a través de varios métodos.

El actual paquete de sanciones tiene como objetivo principal el sector de la energía, prohibiendo que las compañías occidentales comercien y cooperen con Rusia en la esfera de la extracción, refinamiento y las tecnologías de transporte de petróleo. La economía rusa depende en gran medida de las exportaciones de petróleo y gas a Europa. Golpear el sector energético de Rusia y comprometer el proyecto Nord Stream 2, no solo afecta a la economía rusa, sino que también daña las relaciones entre la Federación de Rusia y los estados de la Unión Europea. De este modo, los Estados Unidos resuelven tres cuestiones: 1) socavar a Rusia, 2) sabotear los lazos económicos y políticos entre Rusia y la Unión Europea (una alianza entre los dos sería la peor pesadilla imaginable de los neoconservadores estadounidenses) y 3) forzar a la UE a cambiar a los costosos recursos naturales de EE.UU para satisfacer sus demandas de energía (enriqueciendo las compañías estadounidenses del petróleo y gas, y fortalecer el marco geopolítico transatlántico).

Se trata de poder y dinero. Así de  fácil.


Ah, y, por supuesto, las actuales sanciones también sirven como una herramienta en las maniobras políticas internas en Estados Unidos para socavar la Administración Trump, pero este aspecto es demasiado aburrido e insignificante para tratarlo.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

miércoles, 9 de agosto de 2017

Venezuela Bolivariana: Te llaman “Dictadura”

Sí, mi querida Venezuela, juro que no entiendo a aquellos gobiernos que te llaman “Dictadura”, aquellos países autodenominados “democráticos”, pero que en casa algunos están llenos de fosas comunes, asesinatos extrajudiciales, desapariciones, paramilitares, desplazados, periodistas muertos…


VENEZUELA BOLIVARIANA:
TE LLAMAN “DICTADURA”


Por Níkolas Stolpkin

Te llaman “Dictadura”, esos que nunca vivieron en una dictadura.

Te llaman “Dictadura”, esos que no tienen idea lo que es sufrir una dictadura. Esos que no vivieron las injusticias de Franco, Somoza, Trujillo, Batista, Pinochet… Esos que nunca vivieron lo que eran las torturas sistemáticas, las desapariciones sistemáticas, las violaciones sistemáticas, las ejecuciones sistemáticas… Esos que no saben lo que es salir a la calle y no saber si volverán vivos a sus casas. Esos que no saben lo que es vivir con el miedo a perder un hijo, un padre, una madre, por querer luchar contra las injusticias de una dictadura…

Me niego a entender a aquellos que te llaman “Dictadura”. Que no saben lo que es ser ignorados por los Medios de Comunicación. Que no saben lo que es hablar con sumo cuidado para no ser una nueva víctima de una dictadura. Que no saben lo que es que te cierren las puertas por tus ideas políticas.

Y es que no entiendo a aquellos que te llaman “Dictadura” y pueden viajar tan libremente por el mundo denunciándote… Aquellos que pueden dar entrevistas sin ningún tipo de censura… Aquellos que nunca les falta la comida, pero que te denuncian por falta de alimentos… Aquellos que nunca les falta medicamentos, pero que te denuncian por falta de medicinas… Aquellos que nunca les falta espacio para denunciarte en los Medios, pero que te denuncian por falta de libertad de expresión.

Sí, mi querida Venezuela, juro que no entiendo a aquellos gobiernos que te llaman “Dictadura”, aquellos países autodenominados “democráticos”, pero que en casa algunos están llenos de fosas comunes, asesinatos extrajudiciales, desapariciones, paramilitares, desplazados, periodistas muertos…

Juro que no entiendo a aquellos gobiernos que te llaman “Dictadura”, pero que bombardean Vietnam, Yugoslavia, Afganistán, Libia, Siria, Irak… Que hablan de “democracia”, pero que la abstención suele ser la verdadera triunfadora cada vez que hay elecciones presidenciales o municipales… Que hablan de “Derechos Humanos” y en casa viven aplicando lo mismo que no querrían en otros países (pena de muerte, abuso policial, etc)… Que hablan de “Libertad de expresión” y sacan una “Ley Mordaza”… Que hablan de “participación ciudadana” y sólo les permiten a sus ciudadanos participar para cada elección presidencial o municipal… Que hablan de “no injerencia” y son los primeros que meten sus narices… Que hablan de “intolerancia”, pero que en casa el racismo, la xenofobia siguen siendo pan de cada día… Que te acusan de “Narco-Estado”, pero que no sufres los horrores de los cárteles de la droga como en ciertas “sólidas democracias” y que no eres ni competencia en producción ni en transporte de drogas.

La OEA te llama “Dictadura”. Amnistía Internacional te llama “Dictadura”. Human Rights Watch te llama “Dictadura”. La Unión Europea te llama “Dictadura”. Todos ellos, curiosamente, financiados por el Gran Capital.

¿Qué tienes Venezuela que tanto te odian? ¿Qué tienes Venezuela que tanto se “preocupan” por ti? Sí, Venezuela, tienes hoy a un pueblo de vuelta en casa (Asamblea Nacional Constituyente); tienes las mayores reservas de petróleo en el mundo; tienes a un pueblo bravío con conciencia política y en pie dando la lucha; tienes a un pueblo que participa activamente y que no es apático; tienes a unas fuerzas armadas nacidas del pueblo y sin castas militares. Ya quisieran algunos tener a tu pueblo sumido en la ignorancia y bajo las garras del cruel neoliberalismo.

Es que no entiendo a aquellos artistas y famositos que te llaman “Dictadura” y no sospechan que lo que les sale por sus bocas es una triste copia sacada de los Grandes Medios, de otras figuras, de estructuras afines al Gran Capital o, quién sabe, de algún billetito.

Y es que puedes ver hoy los rostros de la Asamblea Nacional Constituyente, tan distintas a los rostros que acostumbramos a ver año tras año, década tras década dentro de nuestro Poder Legislativo. Y si no son ellos, son sus hijos. La gran diferencia radica en que los primeros representan, claramente, los intereses del pueblo, y los segundos representan los intereses de la Gran Empresa y se pelean entre ellos para recibir la “atención” de los Grandes Intereses. No por nada estos últimos reciben sus buenas mesadas, aparte de sus jugosos sueldos, para que dicten leyes a la medida de sus intereses.


No. No me creeré ese cuento de que eres una “Dictadura” y de que tienes a un “dictador”. Te odian porque no estás de rodilla frente al Gran Capital. Te odian porque eres un país con independencia. Te odian porque tienes riquezas que no están bajo el control del Gran Capital. Te odian porque tienes a un presidente como Nicolás Maduro que prosigue el legado del comandante Hugo Chávez. Te odian porque le entregas voz a tu pueblo. Te odian por llenar de valores a tu pueblo. Te odian por abrirle los ojos a tu pueblo. Te odian porque has acostumbrado a participar a tu pueblo. Por todo eso y más te odian, y por eso tratan de mostrar a sus propios pueblos que eres una “Dictadura”, para que tu ejemplo no pueda contagiar por ningún modo a sus propios pueblos. Por eso tu hija Delcy Rodríguez, y con mucha razón, dijo a los pueblos del mundo: “Pueblo levanta la cara y ve que en Venezuela sí se puede gobernar desde el pueblo; pueblo levanta la cara y toma el poder político; pueblo levanta la cara y derrota a esa oligarquía que te oprime, que te irrespeta.”






Publicado por La Cuna del Sol
USA.