La inminencia de una tercera guerra mundial…

De veras que los gringos y su corifeo principal, el Reino Unido, no pierden el tiempo para fraguar males contra Rusia en la guerra que actualmente libra la federación por liberar a Ucrania del fascismo y el neonazismo que está llevando a este pueblo a la ruina total.                

 

LA INMINENCIA DE UNA TERCERA GUERRA MUNDIAL                 
ESTÁ A LA VUELTA DE LA ESQUINA

Luciano Castro Barillas
Escritor y Analista Político
La Cuna del Sol

De veras que los gringos y su corifeo principal, el Reino Unido, no pierden el tiempo para fraguar males contra Rusia en la guerra que actualmente libra la federación por liberar a Ucrania del fascismo y el neonazismo que está llevando a este pueblo a la ruina total. La mitad del pueblo de Ucrania siempre ha simpatizado con el fascismo, particularmente a partir de la Segunda Guerra Mundial cuando colaboraron con el agresor nazi. Hay resentimientos contra Rusia por lo que hizo Stalin en la gran hambruna tras la confiscación del grano y colectivización de la tierra en 1932-1933, que se conoce como El Holodomor, sufrimiento del que se aprovechó Stepán Bandera para crear sus milicias nazis pues al dictador soviético se le fue la mano.

Como resultado de esta política de rusificación murieron millones de ucranianos y la historia de la utilización del pueblo de Ucrania para intereses ajenos se vuelve a repetir. Ayer fue la Alemania nazi, ahora Estados Unidos y la Europa Occidental. Los gringos y los ingleses son el personaje popularizado por la novela picaresca del Siglo de Oro español (1600), el nunca olvidado Pedro Urdemales o Pedro Ardimales para Jutiapa y El Salvador.

El mundo Occidental sigue urdiendo males contra Rusia y si antes no era muy claro a donde querían ir, ahora sí está totalmente clara su peligrosa estrategia de agresión. El viernes 13, día cabalístico para los supersticiosos, se reúne en los Estados Unidos el primer ministro británico con Antonio Blinken para “discutir”, que más bien sería coordinar, las acciones para autorizar a Ucrania el uso de misiles de largo alcance, por ejemplo, los Storm Shadow, que llegarían al interior de Rusia para atacar zonas industriales, energéticas y poblacionales.

Estos posibles ataques de los occidentales ya han sido advertidos por Rusia una y otra vez.  Entonces, cuando los cohetes lleguen a lo profundo de su territorio, la Tercera Guerra Mundial estaría empezando, aunque no se haya declarado oficialmente. Esto de los misiles de largo alcance es un juego de guerra demasiado peligroso y ante lo cual Rusia tendrá que responder con contundencia. Es la guerra directa con la OTAN, ya sin disimulos. Guerra librada contra Rusia por 40 países. Mientras tanto el mundo, poco despabilado, está comentando el mediocre debate entre Donald Trump y Kamala Harris, cuya manifiesta ligereza política de ambos pone la paz mundial en el filo de la navaja. No se tocó para nada el tema de los misiles de largo alcance, no porque no lo supieran, sino porque ambos tienen la misma disposición y la misma insensatez para incendiar el mundo con una guerra devastadora. Lo mismo harán demócratas y republicanos, que como politiqueros del Tercer Mundo, prometen lo que en el ejercicio del poder no han cumplido.

Ni Trump ni Kamala han cumplido a sus electores. Los dos tuvieron cuatro años para refrendar con hechos lo que afirman con palabras, pues sus obras brillan por la ausencia. Ninguno de los dos es fiable. Los dos son imprevisibles y solo importan ellos mismos y el círculo de amigotes que los rodean. ¿Qué dirán políticos arrastrados como Milei o Boric?, cuando no hubo ni una sola mención en el debate a América Latina. Quizá consideran que quizá los países de América Latina están muy hundidos en la dependencia. Que no están para rezongar al Tío Sam y que al final valen poco para la megalomanía imperialista. Pero se están equivocando. El Parlamento Centroamericano y la bancada Guatemala están considerando la incorporación de la Federación Rusa como observador permanente. Y es probable que esto ocurra o quizá sea rechazo en los meses que vienen.

Está ocurriendo en Centroamérica lo impensable para los Estados Unidos. Y aquí se cumple el viejo dicho que “camarón que se duerme se lo lleva la corriente”. El camarón ruso no está dormido sino muy atento de lo que ocurre en Centroamérica, lo que viene a demostrar la decadencia de los Estados Unidos y el mundo occidental. El Sur Global avanza y tiene diferentes expresiones y mientras los países capitalistas enloquecen en sus pleitos contra China y Rusia, los BRICS, configuran un nuevo orden democrático y sientan plazas en todas partes del mundo. Ojalá prevalezca la cordura en la reunión de hoy viernes 13 en los Estados Unidos y no autoricen a Ucrania el uso de los misiles de largo alcance. Putin ya lo dijo: “Si la OTAN hace eso, estaríamos en plena guerra mundial”.

Publicado por La Cuna del Sol