domingo, 29 de abril de 2018

Cuando los revolucionarios lloran en la tumba de su verdugo


Lejos de acuerpar o acercarse a los movimientos sociales anti neoliberales y con propuestas de cambios estructurales, los dividen y/o denigran. Más, sin embargo, muere el portentoso que los “obligó” a claudicar y expresan su duelo y condolencias. Mientras, las y los sobrevivientes del conflicto armado interno, repudian al fallecido ex Presidente que firmó la paz para implantar el sistema neoliberal que convirtió a Guatemala en uno de los países más desiguales del mundo actual.


CUANDO LOS REVOLUCIONARIOS
LLORAN EN LA TUMBA DE SU VERDUGO


Por Ollantay Itzamná  

La nota pública de condolencia y solidaridad enviada por la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) a los familiares del difunto ex Presidente Álvaro Arzú, firmante de los incumplidos Acuerdos de Paz (1996), evidencia que no existió enemistad alguna entre la opulenta oligarquía y la cúpula de los grupos guerrilleros que capitularon ante Arzú.

La URNG articuló a los cuatro grupos guerrilleros existentes en Guatemala en 1982. En 1996 firmó los Acuerdos de Paz con Arzú y su ejército, luego de 36 años de guerra interna que segó más de 200 mil vidas. En 1999 se constituye legalmente en partido político bajo el mismo nombre. Desde entonces, jamás dejó de tener diputados en el Congreso de la República, y en algunas ventanillas del Estado que lo derrotó.


Este partido político que monopolizó el discurso y privilegios “de izquierda” nacional por casi dos décadas, jamás se opuso a la implantación del sistema neoliberal en Guatemala. Más por el contrario, sus diputados en el Congreso de la República apoyaron, con sus votos y/o abstenciones, diferentes políticas de privatización y/o endeudamiento del país. Hasta ganarse el apelativo popular de izquierda neoliberal, junto a las otras representaciones de izquierda.

En una entrevista, en 2013, el único Diputado Carlos Mejía, de la URNG, ante mi pregunta de por qué no apoyaban a los movimientos indígenas que exigían el debate y revisión de los contratos de privatización, me respondió tajante: “ese asunto ya está definido en el país. Como partido no lo vamos a tocar”.

Álvaro Arzú, fue el gobierno que inició la implementación de las políticas neoliberales del Consenso de Washington (privatizaciones) en Guatemala, incluso antes de firmar los incumplidos Acuerdos de Paz.

Ya en 2012, en la última asamblea nacional de la URNG, sus militantes exigieron y aprobaron la democratización interna del partido y el apoyo/alianza con los movimientos sociales beligerantes del país. Meses después el Consejo Ejecutivo Nacional (CEN) dio por trasto dicho mandato y siguió respaldando al sistema neoliberal corrupto, y censurando a cuantas voces disidentes en su interior.

Frente a esta situación, movimientos sociales como el Comité de Desarrollo Campesino (CODECA) decidieron apartarse de la URNG y proseguir con sus propuestas de nacionalización de los bienes y empresas públicas privatizadas y el proceso constituyente plurinacional. Pero, sorpresivamente el actual Diputado, Walter Félix, de la URNG, mediante sus operadores, atacó y desacreditó a CODECA en las comunidades y municipios acusándolo de “delincuentes”. Igual cómo lo hacían y hacen los empresarios y políticos prohijados por Álvaro Arzú.

La URNG jamás se opuso a la implantación del sistema neoliberal, mediante privatizaciones, en Guatemala. Los contenidos de los Acuerdos de Paz en ninguna medida son anti neoliberales. Esta organización política, que monopolizó el discurso y la representación nacional de izquierda chapina por casi dos décadas, jamás incorporó, ni en su discurso, ni en su praxis, contenidos de los procesos cambio emergentes desde el Sur. Aunque siempre fueron adulones con Chávez, Maduro, Ortega, Castro, etc.

Lejos de acuerpar o acercarse a los movimientos sociales anti neoliberales y con propuestas de cambios estructurales, los dividen y/o denigran. Más, sin embargo, muere el portentoso que los “obligó” a claudicar y expresan su duelo y condolencias. Mientras, las y los sobrevivientes del conflicto armado interno, repudian al fallecido ex Presidente que firmó la paz para implantar el sistema neoliberal que convirtió a Guatemala en uno de los países más desiguales del mundo actual.

Entonces, ¿quién y con qué intereses crearon la URNG? ¿Con qué objetivos fue creada esta organización política que operó con cierta eficacia para la desmovilización de conciencias y voluntades populares en Guatemala? ¿Por qué los ex comandantes, y los perpetuos dirigentes nacionales, una vez que se pusieron traje y corbata, jamás denunciaron con vehemencia el intervencionismo y saqueo violento en Guatemala?






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

jueves, 26 de abril de 2018

Ha llegado el tiempo de decirle al mundo que la ideología comunista es universal


"Los comunistas no se cuidan de disimular sus opiniones y sus proyectos. Proclaman abiertamente que sus propósitos no pueden ser alcanzados sino por el derrumbamiento violento de todo el orden social tradicional. ¡Que las clases directoras tiemblen ante la idea de una revolución comunista! Los proletarios no pueden perder más que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo por ganar. ¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!"


HA LLEGADO EL TIEMPO DE DECIRLE AL MUNDO
QUE LA IDEOLOGÍA COMUNISTA ES UNIVERSAL


Por: Enrique Muñoz Gamarra

Hoy cuando vivimos épocas de completa dictadura imperialista, cuando el fascismo se pavonea en el mundo al amparo de sus miles de artefactos atómicos y sus bandas paramilitares (come carnes humanas) y en el que los genocidios incluso se anuncian de forma descarada desde las más altas tribunas internacionales como lo hizo el presidente estadounidense, Donald Trump, desde la ONU el 19 de septiembre de 2017 con la destrucción total de la RPDC, bravatas ni más ni menos igual a las que proferían Hitler y Mussolini en los años 40 del siglo pasado, ha llegado el momento preciso y exacto de decirle al mundo que la filosofía comunista es universal.

Es el momento en que el proletariado mundial debe saber que tiene la mayor herramienta política e ideológica jamás sintetizada por clase alguna. Se trata de su ideología comunista, nada menos, el conocimiento más claro, más alto y completo, que no puedan compararse ni siquiera un tantito aunque se auto titulen de moderna o supermoderna todas las supercherías e ignaras teorías de la epistemología burguesa (educación, religión, etc.).

Preceden a esto, dos hechos históricos:

Primero, la postura histórica de Marx y Engels en 1847 cuando se les encargo la redacción del Manifiesto Comunista, aceptando aquella tarea histórica solo si lo hacían a nombre de la "Liga de los Comunistas".

Segundo, cuando Lenin en el fragor de la gran revolución bolchevique en Rusia percibió de forma científica la necesidad histórica de cambiar el nombre de la organización del proletariado ruso en lugar de Partido Socialdemócrata de Rusia por Partido Comunista (Bolchevique) de Rusia.

Por eso cuando este primero de mayo de 2018 el proletariado pase revista a sus filas ya de forma militar, está en la imperiosa necesidad de señalarse muy claramente que a partir de aquí utilizara la palabra comunista en todo momento de su vida, incluido, en la clandestinidad.

Bien sabemos que para las burguesías financieras el primero de mayo es un día de distracción y domesticación. No puede ser de otra forma. Así ha sido a lo largo de los años desde la publicación del Manifiesto del Partido Comunista (1847), pasando por el triunfo de la revolución bolchevique (1917), la revolución china (1949) y su derrota militar en Vietnam (1975). Hay un inmenso terror en estas clases porque el proletariado se organice y se arme con su ideología comunista.

En esta orbita, de viles propósitos, también han danzado y danzan las seudo-izquierdas anticomunistas (Eurocomunismo, Podemos, reformismo, etc.) al amparo del legalismo y viejas tesis reaccionarias para retrasar la revolución. Una bestialidad cuyo objetivo era la capitulación ¡Cuánto daño han hecho estas miserables corrientes a la causa del proletariado!

Entonces este primero de mayo de 2018 es un día rojo, como uno, de todos los días de un militante comunista (proletario organizado en su vanguardia política, el Partido Comunista) por hacer realidad la nueva sociedad, la sociedad comunista. Se entiende que todos los proletarios deben aspirar a ser miembros del partido comunista, su organización política.

En este sentido la visión ideológica del proletariado debe ser revalorada desde su filosofía materialista dialéctica hasta su programa histórico que es enterrar el sistema capitalista. Marx lo dijo: "El proletariado es el sepulturero del capitalismo". Eso es el proletariado. .

Y en este proceso deben quedar claro los conceptos científicos del materialismo dialectico, las dos concepciones del mundo, sociedades históricas, sistema capitalista, plusvalía, sistema imperialista, lucha de clases, lucha armada como lucha suprema, revolución, socialismo, dictadura del proletariado y comunismo, lo que debe conducirlos a tener muy claro que todos los países imperialistas junto a sus bombas atómicas y sus armas estratégicas son tigres de papel.
Este claro posicionamiento ideológico es aún más urgente cuando el fascismo estadounidense moviliza sus fuerzas paramilitares previamente habiéndolos preparado en sus células durmientes, en el que cohabitan las bandas asesinas de los movimientos de pandillas, las barras bravas y las bandas de las siniestras sectas religiosas, pretendiendo así, hacerle creer a la humanidad que aquellos escuadrones de mercenarios tuvieran alguna dosis de ideología para compararlos con las organizaciones comunistas y terminar hablando de su macabra y siniestra similitud entre fascismo y comunismo que solo los ignorantes pueden creerle.

Por eso el proletariado es la clase más revolucionaria e invencible que jamás haya existido sobre la faz de la tierra, cuya misión es emanciparse y emancipar a las demás clases, hundiendo el viejo sistema capitalista y construyendo el nuevo que es el sistema socialista en tránsito ininterrumpido al comunismo. Esto es lo que debe saber el proletariado..

Para hacer realidad aquello solo debe organizarse en su partido comunista. Su vanguardia política. Es obligación del proletariado buscar a su vanguardia comunista. Es la enseñanza de Marx de hace más de ciento cincuenta años cuando se publicó por primera vez en 1847 el Manifiesto Comunista. Allí en la parte final se dice lo siguiente:

"Los comunistas no se cuidan de disimular sus opiniones y sus proyectos. Proclaman abiertamente que sus propósitos no pueden ser alcanzados sino por el derrumbamiento violento de todo el orden social tradicional. ¡Que las clases directoras tiemblen ante la idea de una revolución comunista! Los proletarios no pueden perder más que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo por ganar. ¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!"

Aquello no es otra cosa que Revolución Comunista y más Revolución Comunista.

Sin olvidar que pese a las restauraciones capitalistas en la URSS y la China Roja, la sociedad comunista sigue siendo la perspectiva más gloriosa y presente de la humanidad.

(*) Enrique Muñoz Gamarra: Sociólogo peruano, especialista en geopolítica y análisis internacional. Autor del libro: “Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados Unidos”. Su Página web es: www.enriquemunozgamarra.org






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

martes, 24 de abril de 2018

El fiasco del bombardeo occidental contra Siria


Mientras más días pasan desde el bombardeo occidental perpetrado contra Siria el 14 de abril de 2018, más información aparece mostrando la extensión del desastre. En Estados Unidos, el Pentágono todavía logra impedir las filtraciones provenientes de los círculos militares, pero las que van llegando de Francia son devastadoras. Washington, París y Londres mostraron que pretenden seguir regentando el mundo, pero también se ha visto que ya no tienen cómo hacerlo.


EL FIASCO DEL BOMBARDEO 
OCCIDENTAL CONTRA SIRIA


Por Thierry Meyssan

Una semana después del bombardeo occidental contra Siria, aún siguen sin respuesta numerosas interrogantes sobre los objetivos de esa operación militar y sobre su realización. Los hechos demostrados que han ido saliendo a la luz contradicen las declaraciones oficiales de las potencias occidentales.

Los objetivos del bombardeo

Según la narración occidental, el bombardeo no apuntaba a derrocar la República Árabe Siria (lo que los gobiernos y medios de prensa occidentales llaman «el régimen de Bachar» sino a “castigar” el uso de armas químicas.

Sin embargo, no se ha publicado absolutamente ninguna prueba del uso de ese armamento por parte de Siria. A modo de prueba, Estados Unidos, el Reino Unido y Francia publicaron por separado evaluaciones basadas en el video original grabado por los «Cascos Blancos» [1]. El problema es que ese video ha sido desmentido por los testimonios de varias personas que aparecen en él y por el personal mismo del hospital donde fue grabado [2].

Al contrario de lo que afirman las tres potencias occidentales que perpetraron el bombardeo, no es ilógico pensar que el verdadero objetivo era derrocar la República Árabe Siria. Esa posibilidad parece confirmarse por el hecho que varios misiles tenían como blanco el Palacio Presidencial de Damasco. Esa es también la interpretación de Rusia, que estima que el verdadero objetivo del bombardeo occidental era contrarrestar «los éxitos de las fuerzas armadas sirias en la lucha por liberar su territorio del terrorismo internacional».

La destrucción del Centro de Investigación Farmacéutica de Barzeh sigue siendo un misterio. Esa instalación no tenía absolutamente nada de secreta, incluso fue creada con ayuda de Francia. La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) había inspeccionado ese centro 5 veces sin hallar allí nada vinculado a alguna investigación sobre armas químicas [3]. Según los responsables del Centro, ese laboratorio realizaba investigaciones sobre productos contra el cáncer y se vio gravemente afectado por las sanciones occidentales. No estaba bajo custodia militar y no hubo ninguna víctima cuando fue impactado por los misiles occidentales. El bombardeo ni siquiera provocó la dispersión de agentes químicos en la atmósfera.

Esto recuerda el bombardeo estadounidense que destruyó la fábrica de Al-Shifa, en Sudán. En 1998, el presidente estadounidense Bill Clinton ordenó la destrucción de aquella instalación, orden que se concretó con el lanzamiento de 4 misiles Tomawak, con saldo de un muerto y 10 heridos. Los servicios de inteligencia de Estados Unidos afirmaban que la fábrica de Al-Shifa producía gases neurotóxicos por cuenta de Osama ben Laden. Finalmente resultó que era la principal unidad de producción de medicamentos genéricos existente en Sudán [4]. La fábrica de Al-Shifa producía, entre otros, medicamentos contra el sida sin pagar licencia a Gilead Science, empresa que dirigían Donald Rumsfeld y George Schultz [5].

La realización de la operación

Estados Unidos, el Reino Unido y Francia anunciaron haber lanzado 105 misiles, pero las fuerzas armadas rusas contaron sólo 103 [6]. Aunque mantuvo en silencio su participación en la operación, la OTAN garantizó la coordinación entre las fuerzas de las tres potencias occidentales [7]. Según sus estatutos, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) puede actuar solamente después de haber obtenido el aval del Consejo del Atlántico Norte… pero parece que ya no es así ya que el Consejo del Atlántico Norte nunca fue consultado para iniciar los bombardeos contra Libia, en 2011, y nadie protestó por ello. La coordinación a través de la OTAN tenía como objetivo lograr que todos los misiles –lanzados desde unidades navales desplegadas en el Mediterráneo y el Mar Rojo y desde aviones en vuelo– alcanzaran sus blancos en el mismo momento. Pero las cosas no salieron como se habían planeado: la operación occidental debía desarrollarse en media hora pero pasaron 1 hora y 36 minutos entre el lanzamiento del primer misil y el del último.

Rusia había advertido que respondería al ataque si había muertes entre sus militares. Por consiguiente, las tres potencias occidentales ordenaron a sus fuerzas poner el mayor cuidado en evitar bajas entre los militares rusos.

Las fuerzas rusas se limitaron a observar los lanzamientos de misiles y a transmitir en tiempo real las coordenadas necesarias al Ejército Árabe Sirio para que pudiera destruirlos en el aire. Cuando los sirios se vieron desbordados por la cantidad de misiles lanzados, las fuerzas rusas utilizaron su dispositivo de inhabilitación de los sistemas de mando y control de la OTAN, paralizando así el uso de la mayoría de sus lanzadores. Los franceses se vieron así por primera vez ante ese dispositivo, cuyos efectos ya habían sufrido los estadounidenses y los británicos en el Mediterráneo y el Mar Negro, así como en Kaliningrado.

Además, dos navíos rusos salieron del puerto sirio de Tartús para jugar al gato y el ratón con un submarino nuclear de ataque del Reino Unido [8].

Según el estado mayor ruso y su homólogo de Siria, 73 misiles fueron destruidos en vuelo, cifra que los estados mayores de Estados Unidos, Reino Unido y Francia rechazan con tono altanero. Pero todos los observadores presentes en suelo sirio, como es mi propio caso, pudieron comprobar la actividad de la defensa antiaérea y nadie ha visto los supuestos impactos de los 105 misiles occidentales anunciados.

Estados Unidos, el Reino Unido y Francia se apresuraron a declarar que los detalles de la operación eran información clasificada. Sin embargo, los foros especializados han dado a conocer todo tipo de revelaciones inverificables sobre el estruendoso fracaso de la operación occidental. Lo único que ha podido saberse con certeza es que un avión francés no logró lanzar uno de los 2 misiles que debía disparar y tuvo que dejarlo caer en el mar sin lograr que funcionara [9] y que 2 fragatas francesas tuvieron problemas informáticos que les impidieron lanzar todos sus misiles crucero navales (MdCN) [10], anomalías muy conocidas por todos los que han visto sus sistemas de mando y control bajo los efectos del arma rusa que inhabilita los dispositivos radioeléctricos.

La defensa antiaérea siria, ante la gran cantidad de misiles provenientes de todas partes, optó por defender prioritariamente objetivos como el Palacio Presidencial y sacrificar otros, como el Centro de Investigaciones de Barzeh. Como consecuencia del ataque, Rusia ha anunciado el envío de nuevas baterías antimisiles a Siria.

En todo caso, el bombardeo occidental contra Siria ha resultado ser el fiasco militar más grande desde la Segunda Guerra Mundial.

La retórica occidental

A la luz del Derecho Internacional, el bombardeo occidental contra Siria es indiscutiblemente ilegal: ninguno de los tres agresores había sido atacado antes por la República Árabe Siria y el ataque de estas tres potencias occidentales no contó con el aval del Consejo de Seguridad de la ONU.

Estados Unidos, Reino Unido y Francia afirmaron, claro está, que su acción militar contra Siria fue legítima, afirmación desmentida por… el servicio jurídico del Bundestag –el Parlamento alemán [11]. En efecto, aún pasando por alto el carácter totalmente mítico del supuesto incidente químico de la Ghouta, ese tipo de bombardeo no permitiría el fin de los sufrimientos de los civiles.

Francia, por su parte, no deja de repetir que su participación en esa acción militar no significa que haya entrado en guerra contra el «régimen de Bachar», declaración que Siria contradijo de inmediato devolviendo a París la Gran Cruz de la Legión de Honor otorgada al presidente Assad. La portavoz de la presidencia siria precisó que «para el presidente Assad no hay honor en portar una condecoración otorgada por un régimen esclavo de Estados Unidos que apoya a los terroristas».

Algunos autores, cercanos a la OTAN, han mencionado la «responsabilidad de proteger» (R2P) proclamada por la ONU. Pero eso tampoco corresponde a la situación de Siria ya que la R2P sólo se aplica cuando se trata de llenar el vacío de los Estados fallidos, lo cual no es el caso de la República Árabe Siria, cuyos servicios públicos siguen funcionando al cabo de 7 años de guerra.

En definitiva, Estados Unidos, el Reino Unido y Francia sólo han mostrado dos cosas con esta operación: que se han puesto al margen del Derecho Internacional y que sus ejércitos ya no son lo que alguna vez fueron.

 [1] “United States Assessment of the Assad Regime’s Chemical Weapons Use”, Voltaire Network, 13 de abril de 2018. «Évaluation nationale du ministère français de la Défense sur l’attaque chimique du 7 avril 2018», Réseau Voltaire, 14 de abril de 2018. “Syria action – UK government legal position”, Voltaire Network, 14 de abril de 2018.

[2] Ver, por ejemplo, «Testigos oculares revelan montaje del “ataque químico” de la Ghouta», Red Voltaire, 13 de abril de 2018.

[3] Sobre el resultado de la última inspección realizada en el Centro de Investigación de Barzeh, ver “Progress in the elimination of the Syrian chemical weapons programme”, por Ahmet Uzumcu , Voltaire Network, 23 de marzo de 2018.

[4] Sobre las consecuencias desastrosas de aquel bombardeo sobre la situación sanitaria de Sudán, ver el artículo de Werner Daum, por aquel entonces embajador de Alemania en ese país africano, “Universalism and the West. An Agenda for Understanding”, in «The Future of War», Harvard International Review, Vol. 23 (2) – Verano de 2001.

[5] «La guerra como estrategia industrial», Red Voltaire, 19 de marzo de 2003.

[6] «Conferencia de prensa del general Serguei Rudskoi sobre el ataque occidental contra Siria», Red Voltaire, 14 de abril de 2018.

[7] «Falsificaciones “made in USA” y mentiras “made in Italy”», por Manlio Dinucci, Il Manifesto (Italia), Red Voltaire, 18 de abril de 2018.

[8] “British submarine in duel with Kremlin’s ‘Black Hole’ hunter-killer”, Mark Hookham y Tim Ripley, The Times, 16 de abril de 2018.

[9] «Frappes en Syrie: un des missiles Scalp «n’est pas parti» du Rafale», Guerric Poncet, Le Point, 18 de abril de 2018.

[10] «Couacs inexpliqués pour les missiles de MBDA au large des côtes syriennes», La Lettre A, 17 de abril de 2018. «Frappes en Syrie: un couac dans la marine a empêché le tirs de plusieurs missiles», Pierre Julien, RTL, 19 de abril de 2018.

[11] “Völkerrechtliche Implikationen des amerikanisch-britischfranzösischen Militärschlags vom 14. April 2018 gegen Chemiewaffeneinrichtungen in Syrien”, Bundestag, 18 de abril de 2018.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

domingo, 22 de abril de 2018

Los aspectos clave de la revolución de colores en curso en Nicaragua


Lo que empezó con algunas manifestaciones dispersas en rechazo a las reformas del INSS, adquirió un esqueleto de movimiento ciudadano con vocación al choque callejero y la violencia armada, la clásica mutación de las revoluciones de color en busca de lograr mayores grados de confrontación que debiliten al Estado y lo coloquen en una situación defensiva.


LOS ASPECTOS CLAVE DE LA REVOLUCIÓN
DE COLORES EN CURSO EN NICARAGUA


Por William Serafino

Ya son varios días de manifestaciones violentas en la nación centroamericana. Tanto el perfil del mensaje político como el comportamiento de los medios, además del empleo de métodos insurreccionales de protesta y por la propia historia de un país ocupado e intervenido por Estados Unidos en distintas oportunidades, indican que estamos en la presencia de un nuevo intento de cambio de régimen bajo el formato de revolución de colores. Con respecto a los objetivos y su pragmática global, nada nuevo. Socavar la paz de Nicaragua y fabricar las condiciones internas para una etapa de acoso geopolítico, se dibujan como los propósitos inmediatos de la operación.

Insurgencia 2.0

Roberto López, presidente del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social, anunció el lunes 16 de abril una serie de reformas con el fin de aumentar los aportes de trabajadores y empleadores a la seguridad social; también informó sobre la creación de un tributo especial a las pensiones del 5%.

El Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) fue la primera organización de peso en rechazar los anuncios debido a que generaba “incertidumbre” y limitaba la creación de empleos por parte del sector privado.

Que específicamente este sector haya sido el primer doliente debería decirnos bastante sobre el cuerpo de “demandas” e intereses que inicialmente promovieron las manifestaciones. Un evidente ejercicio de solidaridad de clase. El país todavía hasta ese día estaba en calma total.

Al día siguiente de la información de las reformas surgió una cuenta en Twitter llamada #SOSINSS, el nombre en sí genera dudas sobre la razón particular de vincular la señal internacional de socorro (recurso operativo típico de las revoluciones de colores en redes sociales) con el Instituto de Seguridad Social. Su propio curso de acciones disiparía todas las sospechas 24 horas después.

En principio moldearon el sentido político que promovería la agitación. Las publicaciones iniciales construían una narrativa de cohesión ciudadana frente a las reformas, que por medio de un tratamiento selectivo de los impactos, se colocaba en aparente confrontación con el Estado, razón por la cual tenía un sorpresivo sentido de urgencia salir a protestar.

Este relato configuró un esquema de apoyo público inicial en los sectores medios y bajos a los intereses de la clase empresarial que luego se ampliaría hacia los medios locales (El Confidencial, La Prensa, entre otros) y los internacionales (Reuters, BBC, El País, etc.).

Después saltaron a instrumento de movilización y convocatoria. Apartando cualquier responsabilidad, se volcaron como medios de difusión y convocatorias de “plantones” en edificios gubernamentales, y en específico en las sedes del INSS, los cuales se transformarían en los puntos de partida de un violencia callejera en ascenso. Ahora sí se entendía el uso propagandístico del #SOS. Los conatos de protesta iniciaban y la violencia escalada rápida pero focalmente.

El uso de esta cuenta parece haberle permitido a agitadores profesionales y sus nexos con capas de la criminalidad operar con flexibilidad en el terreno, suprimir la identificación con algún frente político ligado con la oposición nicaragüense y por ende con Estados Unidos, y camuflar bajo el ropaje de una acción ciudadana acciones de violencia extrema contra centros de salud, sedes de patrimonio cultural, centros de acopio y sitios gubernamentales. Ya el jueves y el viernes, el país estaba en tensión y trifulcas callejeras.

Los “plantones” no sólo fueron expandiéndose hacia varios puntos de la geografía nacional (en 8 departamentos aproximadamente), sino que fueron mutando progresivamente a cúmulos de violencia extrema donde resalta el uso de armas de fuego no convencionales para intensificar el choque con las fuerzas de seguridad, la alteración de la tranquilidad pública y la vialidad y el ataque armado contra distintos espacios públicos y la ejecución de saqueos a comercios.

La cuenta #SOSINSS, que ya había cumplido su papel como articulador de las protestas y convocante de primera línea en redes sociales, cambió su orden de prioridad hacia el control y direccionamiento del flujo informativo alrededor de los choques. Esto con el fin de glorificar la violencia, situar como víctimas a los actores que protagonizaban los choques con la fuerza pública y servir de fuente primaria para la prensa internacional, un aspecto fundamental en la posterior cartelización de cifras manipuladas en torno a los hechos.

Protestas marca USAID, criminalidad y el discurso del cambio de régimen

Como parte de la cartilla globalizada que describe una revolución de colores, las protestas en apariencia han sido ciudadanas, protagonizadas por los jóvenes, antipolíticas (sin nexos con partidos tradicionales) y en principio con fines reivindicativos.

Lo que empezó con algunas manifestaciones dispersas en rechazo a las reformas del INSS, adquirió un esqueleto de movimiento ciudadano con vocación al choque callejero y la violencia armada, la clásica mutación de las revoluciones de color en busca de lograr mayores grados de confrontación que debiliten al Estado y lo coloquen en una situación defensiva.

En lo narrativo parece estar la intención de configurar un frente político (posmoderno) donde puedan articularse un conjunto de “demandas” gremiales prefabricadas por la USAID, lo que a su vez contribuye a reflotar la imagen de la oposición ampliando su base de apoyo político hacia “la juventud” y los “descontentos”. Es por esa razón que las protestas tienen un corte juvenil y universitario, son los extras que necesitan para desviar la atención de los grupos armados que inflingen los ataques más graves.

Porque el signo USAID en este nuevo intento de cambio de régimen en Nicaragua no sólo está en el profuso financiamiento que entrega a organizaciones políticas opositoras y ONG locales, fondos que pudieron tener como destino probable el adiestramiento en tácticas de subversión y guerra urbana. Un total de 31 millones de dólares entregados nada más en 2016 han recibido bajo la cobertura de “Desarrollar las capacidades para la defensa de la sociedad civil”.

Eslogan que puede ser útil para promocionar foros y actividades académicas, pero también para dar asesoramiento en cómo enfrentar a las fuerzas de seguridad y hacer uso de bandas criminales con una presencia notoria en el país.

Este aspecto representa la porción más grande del financiamiento a estas organizaciones gestionado por la USAID en Nicaragua. Esta institución resalta públicamente que el dinero entregado tiene como finalidad desarrollar la gobernanza civil utilizando los medios de comunicación en el país centroamericano.

En nota del 16 de abril el portal Nicaleaks le daba rostro, nombre y apellido a los organizaciones financiadas que promovieron la violencia en las calles: “Esta mañana, los dirigentes de las ONG opositoras, como el Cenidh, CPDH, Fundación Violeta Barrios de Chamorro y Hagamos Democracia, entre otros, así como grupos políticos (FAD, MRS, etc,.) y medios de comunicación como la misma Prensa y Confidencial, amanecieron con los brazos y bolsillos abiertos en espera que la USAID siga destinando dinero para eternizar el estatus de vida que llevan”.

En esa exposición de motivos se ubica la sustancia política marca USAID en el curso de las protestas violentas. Muestra de ello es el Departamento de Estado de EEUU, que para mantener un clima de tensión permanente en las relaciones de EEUU con Nicaragua, emplea una narrativa de promoción de la libertad de expresión, la democracia y de mayor participación de la sociedad civil como condiciones “naturales” que deben imperar, animando claramente a la oposición a socavar el gobierno de Ortega mediante el uso de los medios de comunicación y con manifestaciones violentas. La utilidad práctica de la “gobernanza” a la que se refiere la USAID.

Como si se tratara de una imagen pasando por una fotocopiadora, los primeros “plantones” que rechazaban las reformas del INSS mutaron hacia un movimiento insurreccional que justifica su existencia en las mismas demandas del Departamento de Estado, agregando por supuesto la agenda “anticorrupción” y la ausencia de libertad de expresión, que también provienen de la oferta de productos políticos de la USAID. De un reclamo en apariencia reivindicativo, la razón política de la movilización se trasladó hacia exigencias de cambio político.

Y es que detrás de esa neolengua presentada como escala de valores indispensable para cualquier sociedad (la democracia liberal, la libertad de expresión, etc.), que pasa por encima del contexto cultural y político de cada país, se camuflan los nuevos atributos del poder global: la ampliación de la zona de control y sometimiento sobre el cuerpo social, político, económico e institucional de la periferia, mediante el uso de estructuras privadas (ONG, medios de comunicación, programas de cooperación económica privada, etc.) que pujen por subordinar desde adentro al Estado y a la sociedad a las preferencias del capital financiero transnacional.

Lo que llaman el poder “blando”.

Geopolítica: Canal Interoceánico, la Nica Act acelera los motores y el poder del “poder blando”

A diferencia de las protestas también violentas del año 2015, dirigidas a simular un escenario de rechazo generalizado al Canal Interoceánico, éstas de 2018 reflejan un cambio de naturaleza por un lado, y por otro, los frutos tangibles de los últimos años de financiamiento de la USAID: el adiestramiento y proliferación de los medios y las redes sociales en Nicaragua fueron armas utilizadas para alterar la estabilidad política del país, quizás por primera vez con ese nivel de eficacia, capacidad y resonancia.

En aquel momento fue el Movimiento de Renovación Sandinista, que buscaba perfilarse como una opción electoral seria para la oposición, la cara visible que organizó parte de las movilizaciones y asumió una pronunciada direccionalidad política.

Una realidad totalmente contraria a la luz de un movimiento de laboratorio que emergió de las redes sociales, que se organizó en la calle con agitadores con conexiones no visibles, adquirió un barniz juvenil y encontró su propia forma de oxigenarse empleando rumores y operaciones de propaganda para ablandar a las fuerzas de seguridad e inducir mayor inestabilidad.

Es así como se han agregado expresiones musicales juveniles y frentes de estudiantes universitarios como vanguardia ideológica y moral, y sobre todo como coberturas gremiales, de la operación de cambio de régimen. Sensibilizar a la opinión pública y utilizar las redes sociales para glorificar la violencia, toda vez que en el terreno los agentes criminales hacen el trabajo sucio, forma parte del manual global de las revoluciones de color. Nada nuevo, salvo la adaptación de sus fines en lo local.

En tanto método de laboratorio, sus objetivos son múltiples y no caminan siempre en una dirección lineal, sino adaptados a las condiciones y límites del Estado-víctima. Es por eso que las manifestaciones violentas no parecen tener un objetivo final en sí mismo, más bien podrían apuntar a generar condiciones de inestabilidad y “rechazo” interno con la suficiente resonancia para impulsar una operación de acoso geopolítico.

Por esa razón han concurrido a respaldar el choque violento en las calles y a tildar como “violenta” la contención de las manifestaciones, ONG de la talla (por su presupuesto en dólares proveniente de EEUU, nada más) de Amnistía Internacional, de Human Rights Watch, ambas escoltadas por la Secretaría General de la OEA, la Unión Europea y los gobiernos de EUU y Costa Rica.

Por medio de esa persuasión se intenta estandarizar el tratamiento en torno a los choques callejeros, negando las propias coordenadas de la personalidad nicaragüense que asume la política con varios decibeles de intensidad, a su vez que glorifica como víctimas a los instigadores que dirigieron las manifestaciones a la violencia profesional.

Es probable que esta maniobra interna pueda servirle al Senado de los EEUU para acelerar la aprobación de la Nica Act, una ley dirigida a cerrar los canales de financiamiento del país en el sistema financiero internacional dominado por Washington. Según sus promotores, los senadores Marco Rubio, Bob Menendez, entre otros, la razón de su aplicación es la falta de elecciones libres, violaciones a la Ley, los derechos humanos y la corrupción del gobierno nicaragüense.

Ahora la oficialización del bloqueo financiero contra el país centroamericano podría venir bajo la excusa de defender a los manifestantes o para evitar una “mayor represión” por parte del sandinismo, haciendo uso de la ventaja comparativa que le da tener a la USAID como acto reflejo de la “sociedad civil” en “defensa de la democracia”.

“No voy a dejar de defender la democracia, eso es parte de nuestra política y seguirá siendo parte de nuestra política”: apoyándose esa misma premisa el embajador gringo Paul Trivelli se justificaba ante la prensa cuando, en 2006, ofrecía públicamente millones de dólares a todas las organizaciones que buscaran hacerle oposición, electoral o no, al gobierno de Daniel Ortega.

La capa fundamental de este nuevo intento de cambio de régimen en Nicaragua parece estar atravesado por una condición inalterable y sumamente conflictiva: su ubicación geográfica y el interés binacional entre Nicaragua y China por construir un Canal Interoceánico de 270 kilómetros que desplace al de Panamá como única arteria comercial entre los dos océanos.

La culminación y entrada en funcionamiento de este mega proyecto en el mediano plazo significaría una pérdida tangible en el control financiero y comercial de EEUU, lo que tendría implicaciones tanto en su posición de dominio sobre la región, como también en su estatus de rector comercial a nivel mundial, justo cuando emprende una guerra financiera de larga duración contra China.

Lo que se está jugando EEUU en Nicaragua es fundamentalmente la ventaja geoestratégica que desde principios de siglo XX le ha dado el Canal de Panamá. Y la urgencia geopolítica por impedir que el proyecto avance tiene su medida en el financiamiento entregado a la oposición durante años y la sobredosis de violencia armada en los últimos días. Es indispensable para ellos un cambio de gobierno en Nicaragua para colocar una nueva administración que desista del Canal Interoceánico.

No en balde uno de los ganchos narrativos de las manifestaciones es la oposición férrea al proyecto, un aval político prefabricado pero no por eso menos útil para que la Nica Act cierre los grifos de financiamiento hacia el Canal.

Lo atestiguamos en la Primavera Árabe, durante el Maidán ucraniano, en el marco de la protestas en Brasil, y en 2014 y 2017 específicamente en Venezuela: las operaciones de cambio de régimen no culminan cuando lo hacen las protestas, sino que mutan y asimilan un conjunto de frentes que le dan una continuidad más agresiva desde el poder formal.

Lo ocurrido en los últimos días puede ser instrumentado para dar forma a sanciones económicas, complicar el posicionamiento diplomático del país y desmovilizar los objetivos políticos prioritarios del gobierno de Daniel Ortega mediante el acoso foráneo. Y ese es el cálculo inicial de fabricar una primavera a la nicaragüense adaptada a las capas de criminalidad y crimen organizado que tienen vida en el país y que pueden ser empleados si la agenda política propuesta se presenta como rentable.

Mientras esta etapa germinal va agarrando una tonalidad más sobresaliente, los medios locales e internacionales ya cometieron sus respectivos crímenes elevando la cifra de muertes a 10, cuando en realidad murieron cinco -entre ellos un efectivo policial y el periodista del Canal 6, Ángel Gahona- para luego trasladar la responsabilidad de todos los hechos al gobierno de Daniel Ortega mientras se finge demencia por los daños humanos y materiales generados por los grupos violentos. Ninguna de las víctimas participaba en las protestas.

La fábrica globalizada de fake news se pone a prueba en Nicaragua y al servicio de grupos armados profesionales que ejecutan actos de violencia extrema. Y la siguiente maniobra de los medios está en pleno desarrollo: crear un mártir que evite una desmovilización de la violencia y otorgue una carga simbólica para mantener la agenda a flote en caso de un reflujo. Pareciera que Ángel Gahona cumple con las características necesarias en medio de la urgencia por una muerte política que le dé cuerpo físico a la confrontación.

La clase empresarial por su parte hace suya la violencia en las calles y opera en función de lograr una concesión del gobierno que luego sea vendida como una “victoria del pueblo”. Esto nos deja una fotografía lo bastante nítida para describir la técnica política del golpe blando y/o revolución de colores. Parafraseando: no se busca la caída del régimen por métodos directos, sino a partir del uso de las herramientas culturales, tecnológicas y políticas de la globalización, así como su propio discurso reivindicativo, para provocar un cambio político que no tenga las huellas de un poder extranjero.

Lo sabemos en Venezuela, donde una exigencia reivindicativa (“referendo revocatorio”, “elecciones generales”, etc.) es utilizada como una demanda inalcanzable, pues todo se trata de encubrir bajo un reclamo vestido de ciudadano una agenda de violencia interna y cerco internacional y financiero promovida por Washington. Desde el año 2002.

“Un Estado y una política que no los deja constituirse como ciudadanos y un mercado que no les permite realizarse como consumidores (…) y si pudieran emigrar para mejorar sus condiciones de vida, lo harían”: esto dice una nota publicada en el medio local El Confidencial, quien ha intentado manufacturar un carácter juvenil de las protestas. Más que una acotación al aire, es quizás una demostración de que la política marca USAID tiene una capa social dónde calar culturalmente, pues cobran políticamente las crisis existenciales de la juventud emergente y globalizada, únicamente preocupada por el desarrollo de su “talento individual”, y acomodarse en un lugar de “éxito” dentro de la sociedad de consumo global.

Es la vía del poder blando por donde avanzan los rasgos más distintivos de la destrucción de la conciencia nacional, de su cuerpo social y ético, el sandinismo y el chavismo bajo la misma zona de peligro en lo cultural.

Otro desagradable guiño con Venezuela, por cierto, donde la base opositora (centrada en la clase media) que también fue víctima de la revolución de colores, hoy se debate entre irse del país, pedir una intervención extranjera a gritos o frustrarse a sí misma absteniéndose en las próximas elecciones presidenciales. Todo ese peso mientras siente en carne viva los daños económicos de la agenda posterior que resultó de las convocatorias de movilización y “plantones” que ella respaldó.

Traumas sociales que quedan sin resolver, toda vez que también sirve un activo político para un poder global igual de demente.

El porcentaje de poblaciones de acceso a Internet en el país centroamericano roza apenas el 19%; quedará esperar a ver si más allá de las redes sociales la grieta que dibujan los medios es tal, o si su alcance ya es suficiente para que opere el poder que de verdad financió la violencia.

http://misionverdad.com/COLUMNISTAS/aspectos-clave-de-la-revolucion-de-color-en-nicaragua-analisis-especial






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

miércoles, 18 de abril de 2018

EEUU no quiere una base en Ecuador, quiere algo más devastador


La estratagema inició el 27 de enero de 2018 en San Lorenzo, cerca de la frontera norte con Colombia, cuando el país sufrió la detonación de un coche bomba. Mientras las respuestas gubernamentales eran escasas y descoordinadas, en tres días una comitiva del Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos llegó al Ecuador.


EEUU NO QUIERE UNA BASE EN ECUADOR,
QUIERE ALGO MÁS DEVASTADOR


Por Martín Pastor

Estados Unidos no quiere recuperar una base militar en Ecuador por que es altamente costosa; implica gastos en personal militar, mantenimiento e inversión en infraestructura. Por esta razón el acercamiento entre la embajada norteamericana y el Gobierno de Lenín Moreno es señal de algo más devastador.

Esto sería una renovada fase de injerencia directa e indirecta sobre las Fuerzas Armadas, Policía Nacional y soberanía nacional.

La estratagema inició el 27 de enero de 2018 en San Lorenzo, cerca de la frontera norte con Colombia, cuando el país sufrió la detonación de un coche bomba. Mientras las respuestas gubernamentales eran escasas y descoordinadas, en tres días una comitiva del Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos llegó al Ecuador.

Lo determinante de la situación es que ante “el primer gran reto de seguridad la reacción del gobierno fue traer a Estados Unidos”, como lo señaló Guillaume Long, exministro de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana. El atentado terrorista dio paso a un incremento de ataques y paralela presencia de los norteamericanos en las esferas militares y gubernamentales.

La explosión de una bomba casera en el retén de la Armada en Borbón y los ataques a militares y policías en El Pan, el Alto Tambo y Mataje en la frontera con Colombia desatarían la respuesta dirigida de la derecha oligárquica y ciertos grupos de interés. El discurso compartido fue culpar estas agresiones a la salida de la Base de Manta en 2009.

Para el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, la solución sería una base militar con presencia norteamericana. A lo cual le hizo eco el excandidato presidencial y General en servicio pasivo, Paco Moncayo, concluyendo que "sacar la base de Manta y no tener con qué reemplazarla fue tonto e irresponsable”. Incluso miembros de la prensa nacional se sumaron a la propaganda arguyendo que la seguridad nacional recae en la necesidad de una presencia extranjera militar.

En otras palabras, buscan justificar lo injustificable. La pérdida de soberanía nacional, la presencia del ejército más peligroso del mundo en Ecuador y el irrespeto a la Constitución son cuestiones secundarias. Pero para lamento de ellos, Estados Unidos no quiere una base militar en Ecuador y aunque la quisieran, no podrían, sería inconstitucional.

El artículo 5 de la carta magna del 2008 indica que “no se permitirá el establecimiento de bases militares extranjeras ni de instalaciones extranjeras con propósitos militares. Se prohíbe ceder bases militares nacionales a fuerzas armadas o de seguridad extranjeras.” Entonces, ¿qué buscan los yanquis en Ecuador?

Una clave para la respuesta la dio el embajador Todd Chapman durante la celebración de los 154 años de vida institucional de la Policía Nacional. El diplomático explicó que Estados Unidos quiere ser un “buen socio” para el país ya que su “compromiso es dar seguridad a Ecuador” y cooperar con las instituciones del Estado relacionadas a la seguridad nacional.

La cooperación ofertada incluye brindar capacitación, inteligencia, intercambio de información y acceso a colegios militares, donde oficiales del Ecuador podrán “formarse” nuevamente. Un escalofriante recuerdo que remonta al funcionamiento de la Escuela de las Américas, institución de adoctrinamiento militar e ideológico de los Estados Unidos, encargada de ‘capacitar y formar’ a escuadrones de tortura y muerte en toda Latinoamérica durante los años 70, 80 y 90.

Esta de-formación ideológica, que implica la supuesta capacitación militar, es una amenaza a los ecuatorianos y latinoamericanos ya que atenta directamente a la democracia y la soberanía de las FFAA y elementos de seguridad nacional. La experiencia reciente con fuerzas de seguridad en los países invadidos de Irak y Afganistán lo demuestra.

No es casualidad entonces, que Moreno haya eliminado la Secretaría Nacional de Inteligencia (Senain). Desmantelar instituciones y promover, con el apoyo de los medios de comunicación, un discurso sobre cómo se “mermó” a las Fuerzas Armadas es parte de la estrategia de ingeniería social, común de los norteamericanos.

Esta funciona al crear/presentar un problema (tesis) para incitar una reacción (antítesis) y de esa manera presentar una solución (síntesis), la cual en una situación regular, no inducida, no sería aceptada por la gran mayoría.

Todas estas medidas están ligadas al objetivo principal que es lograr la injerencia indirecta a través de la intervención en la toma de decisiones y el manejo de influencias dentro de las Fuerzas Armadas y Policía ecuatoriana.

Es por este tipo de intrusión que Rafael Correa expulsó a diplomáticos estadounidenses, una embajadora, y casi 20 funcionarios del Pentágono que trabajaban en Ecuador. Uno de los casos más emblemáticos es el de Mark Sullivan, exprimer secretario de la embajada, que en 2009 fue expulsado por interferir en asuntos policiales e internos.

Sullivan amenazó con cortar la ayuda de su país a la policía después de que el gobierno ecuatoriano cambió al jefe de la Unidad de Investigaciones Especiales sin consultar a los estadounidenses, según un informe de la Comandancia de la Policía. Las visitas del actual embajador estadounidense a las distintas carteras de Estado muestran que su figura de ‘consultor’ se retomará.

De igual manera necesitan restablecer la relación directa con las Fuerzas Armadas, obviando los canales oficiales y legales. Táctica que realizaban habitualmente, como lo demostraron varios cables de la embajada desclasificados por Wikileaks.

En uno que data al 2009, Heather Hodges, exembajadora en Ecuador, comenta que habían desarrollado “una estrategia para mantener la interacción con las fuerzas militares en Ecuador. Utilizando nuestra experiencia de cooperación con la Policía Nacional ecuatoriana vamos a hacer que la presión contra el liderazgo político del gobierno de Ecuador surja desde adentro de las fuerzas militares…”.

Otro del 2005 detalla como los Estados Unidos ofrecerían “regalos” a los oficiales ecuatorianos de las Fuerzas Armadas para que estos “presionen a sus superiores para obtener regalos similares” y así logren inspirarlos a firmar acuerdos en los intereses de los Estados Unidos.

Esa violación del derecho internacional, la diplomacia, y la institucionalidad democrática, tiene un objetivo: crear quintas columnas dentro de las FFAA y Policía Nacional. Finalidad que los norteamericanos persiguen pero no con una Base militar sino con el acceso indiscriminado a las instituciones que sostienen la seguridad nacional.

Ante esto su justificación pública sigue siendo la lucha contra el narcotráfico. Pero si la presencia de los estadounidenses, en bases o a través de cooperación fuera eficiente, ¿por qué luego de casi 20 años del Plan Colombia, siete bases norteamericanas en territorio colombiano y más de 10 mil millones de dólares (2016) en cooperación; los cultivos de coca en Colombia incrementaron a 146.000 hectáreas en 2016, volviendo a aproximadamente los mismos niveles de los primeros años del Plan en 2001?

La respuesta es que luchar contra el narcotráfico no es su prioridad o se dedicarían a combatirlo en su propio territorio. Su objetivo, como imperio basado en el poder bélico, es incrementar la presencia militar en la región con el fin de asegurar sus  ‘intereses hemisféricos’; consolidar, a través de favores políticos, un bloque regional en contra de Venezuela; y justificar su presencia en la zona,  ya que con los diálogos de Paz no podrán seguir operando como la han hecho durante casi dos décadas.

En palabras de Joseph Disalvo, subcomandante del Comando del Sur, “debemos pensar en una estrategia nueva que más que un Plan Colombia sea un plan Sudamérica, donde todo el mundo pueda combinar sus esfuerzos y así luchar contra esto (narcotráfico).” 

Este Plan Sudamérica de carácter neocolonial demuestra que para ellos este es su continente y América Latina su ‘colonia’. Para lograr el cometido, manipulan las débiles políticas de seguridad nacional y se aprovechan del entreguismo de los gobiernos actuales de la región. Y es así que la renovada presencia militar no pone en riesgo a un solo país, sino la soberanía y futuro de toda América Latina.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.

domingo, 15 de abril de 2018

Frustrado el plan secreto de los Estados Unidos sobre Damasco: Se da a conocer el papel ruso antes y después del ataque de EE.UU, El Reino Unido y Francia


Rusia había informado al liderazgo sirio sobre una gran concentración de fuerzas en la base militar Al-Tanf ocupada por los EE.UU en las fronteras sirio-iraquí, donde decenas de miles de mercenarios al servicio de los estadounidenses han recibido entrenamiento militar continuo.


FRUSTRADO EL PLAN SECRETO DE LOS
ESTADOS UNIDOS SOBRE DAMASCO: SE DA A CONOCER
EL PAPEL RUSO ANTES Y DESPUÉS DEL
ATAQUE DE EE.UU, EL REINO UNIDO Y FRANCIA


Por Elijah J. Magnier

Donald Trump ha bajado del árbol al que subió hace unos días cuando reunió una gran fuerza militar y una capacidad de fuego similar a la "operación tormenta del desierto" (pero sin fuerzas terrestres). El "Plan A" consistía en un ataque destructivo sobre Siria para destruir su ejército, palacio presidencial, bases de comando y control, fuerza de élite, depósitos militares y de municiones estratégicos, radar, sistemas de defensa e instituciones de liderazgo político.

Antes del triple ataque a Siria por parte de EE.UU, Reino Unido y Francia, Rusia y el propio presidente Vladimir Putin llevaron a cabo intensos contactos alrededor de las 04:00 am para reducir el ataque y pasar a un "Plan B más suave y menos significativo".

Rusia, en su contacto con varios jefes de estado, rechazó cualquier ataque que pudiera paralizar al ejército sirio e instruyó a los líderes en Damasco sobre que Occidente ahora pensaría con mucho cuidado antes de cambiar radicalmente el equilibrio de poder en el Levante.

Pero, ¿cuál es la verdadera razón detrás del ataque de los EE.UU, el Reino Unido y Francia? ¿Es la aaseveracion del "ataque químico" en Duma? La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas ya se encuentra en Damasco y sus miembros visitaran Duma este sábado para inspeccionar el lugar donde presuntamente se produjo el uso de un ataque químico. ¿Por qué no esperar los resultados?

Las fuentes en Damasco explican que el ejército sirio y sus aliados, apoyados por Rusia, estaban llevando a cabo una gran ofensiva en el área rural de Idlib y habían llegado al aeropuerto de Abu al-Duhur cuando, de repente, la operación militar se detuvo. Toda la fuerza de avanzada fue movida a Ghouta. ¿Qué pasó?

Rusia había informado al liderazgo sirio sobre una gran concentración de fuerzas en la base militar Al-Tanf ocupada por los EE.UU en las fronteras sirio-iraquí, donde decenas de miles de mercenarios al servicio de los estadounidenses han recibido entrenamiento militar continuo. Los rusos identificaron movimientos militares inusuales y comprendieron que los EE.UU se estaban preparando para empujar a las fuerzas mercenarias sirias para llegar al este de Ghouta, uniéndose a unos 30,000 yihadistas en la propia Ghouta. Se planeó que este ataque se llevara a cabo simultáneamente con una distracción desde Daraa, en el sur de Siria, atacando el sur de Damasco para engañar al ejército sirio y sus aliados para que dejaran fuerzas más pequeñas alrededor de la capital.

El plan de los EE.UU, dijeron las fuentes, consistía en apoyar a sus mercenarios y a los yihadistas de Ghouta para que llegaran a Damasco y tomaran el control total de la misma. Pero el cambio de la operación militar de Idlib a Ghouta arruinó el plan de Estados Unidos de imponer a Rusia una estadía forzada en Lattakia y Tartous confinada a una zona limitada, y finalmente cambiar el régimen sirio. Este "plan de genios" habría arruinado todos los esfuerzos de Rusia desplegados a lo largo de casi tres años de gran participación en la guerra en Siria, y habría dado a los EE.UU la ventaja, justo en el momento en que Moscú y el ejército sirio estaban a punto de terminar con la guerra, con solo unos pocos bolsones más por liberar.

El golpe de Rusia en Ghouta hizo pedazos el plan de Estados Unidos, e impuso la retirada de decenas de miles de militantes de Ghouta junto con sus familias, hacia el norte de Siria. La capital es mucho más segura ahora, con la zona restante al sur de Damasco ocupada por Al-Qaeda y el grupo del "Estado Islámico" (ISIS) en el campamento de Yarmouk y al-Hajar al-Aswad.

Hoy Rusia invalidó el ataque de EE.UU, Reino Unido y Francia, tanto en lo que respecta a su contenido como a sus objetivos. Rusia fue capaz de imponer que los Estados Unidos, el Reino Unido y Francia realizaran solo un "ataque limitado" de poco valor, y con pocas posibilidades de alterar la realidad sobre el terreno en Siria.

Cuando Rusia prometió derribar misiles disparados contra Siria, Trump respondió: "Prepárate Rusia porque vendrán, bonitos, nuevos e inteligentes". Rusia, después del ataque, respondió: "Hemos utilizado el antiguo sistema de defensa antiaérea soviético contra estos misiles inteligentes, nuevos y muy caros disparados por los estadounidenses". No solo eso, los ataques aéreos de EE.UU-Gran Bretaña golpearon objetivos que Israel bombardea casi de forma regular. Al mostrar la capacidad de detener dos tercios, como declaró Rusia, de los misiles entrantes, Siria lo toma como una especie de "entrenamiento con munición real contra cualquier futuro ataque israelí en el territorio sirio". Israel está muy decepcionado y no parece nada satisfecho con este resultado.

Mostrando mesura y control, el Secretario de Defensa de los Estados Unidos James Mattis -él que dijo que "el Pentágono todavía no tiene evidencia independiente para confirmar que hubo un ataque con armas químicas en Siria la semana pasada"- disputó cualquier ataque a gran escala contra Siria que podría haber desencadenado una participación directa de Rusia respondiendo con fuego mortal contra los objetivos estadounidenses. Mattis aceptó "un ataque honorable" para evitarle una humillación a su inexperto jefe. De hecho, el ataque del trío contra Siria parece haber incrementado la reputación del presidente sirio Bashar al-Assad: ¡la población celebró en las calles de Damasco y se burló del ataque de occidente a su país!

El trío evitó en todo momento provocar directamente a Rusia, evadió las bases rusas y los teatros operativos en lugar de sobrevolarlos. Rusia impuso su presencia y provocó a la armada estadounidense y francesa realizando un ataque aéreo simulado, para mostrar su voluntad de contraatacar. La armada rusa estaba situada frente a la costa libanesa para cubrir ese ángulo y evitar los puntos ciegos.

Moscú logró evitar una confrontación directa con Washington fuera de su territorio: bases militares estadounidenses rodean a Siria (Israel, Jordania, al-Tanf, al-Hasaka, Arabia Saudita, Kuwait, Qatar, Bahrein, Iraq, Turquía). Rusia recuerda cómo Leonid Brezhnev cayó en la trampa de la CIA en 1979, apoyando a los muyahidín seis meses antes de la invasión soviética de la trampa de Afganistán. Zbigniew Brzezinski dijo que la invasión soviética de Afganistán fue provocada deliberadamente por los Estados Unidos: "Fue una idea excelente. Atrajo a los soviéticos a la guerra afgana y les dimos su Vietnam”. Putin ha evitado la misma trampa estadounidense casi 40 años después.

¿Cuál es el próximo paso?

Todos los ojos están dirigidos a la ciudad norteña de Idlib controlada por al-Qaeda ahora que el destino de Damasco está asegurado. Pero, ¿por qué Idlib?

La situación en el campamento de Yarmouk, al sur de Damasco, parece estar directamente relacionada con la de Fua y Kfarya. Durante la negociación de Zabadani, se acordó entre al-Qaeda y los aliados de Damasco mantenerse alejados de al-Yarmuk, a cambio de las dos ciudades sitiadas en el norte de Siria. Sin embargo, Damasco ahora está presionando para limpiar completamente la capital, intentando persuadir a sus aliados para eludir los compromisos anteriores.

En lo que respecta a Daraa y Quneitra en el sur, parece que nadie en Siria parece dispuesto a provocar a Estados Unidos e Israel en este momento tenso; esto quizás se deje hasta el final. En al-Badiyah, las estepas sirias, ISIS está totalmente rodeado y solo puede esperar ser exterminado en los próximos meses.

Resta Idlib, a pesar del acuerdo económico y financiero turco-ruso-iraní. No hay dudas sobre la existencia de fuertes diferencias de naturaleza económica entre los socios sobre Siria.

El presidente turco, Erdogan, expresó su apoyo y posteriormente satisfacción con los ataques de Estados Unidos contra Siria. Rusia respondió pidiéndole que entregara la ciudad de Afrin al gobierno sirio. El enviado especial de Irán para los asuntos sirios, Ali Akbar Velayati, declaró abiertamente que el próximo objetivo es Idlib. Por lo tanto, ahora es factible que Turquía se retire de la docena de puestos de observación alrededor de Idlib, de la misma manera cuando Rusia se retiró de Afrin antes del ataque turco. Y Rusia espera que Erdogan cancele cualquier día la venta previamente acordada de los misiles S-400.

Por lo tanto, la brújula apunta a Idlib, Rastan, Jisr al-Shoughour y a las fuerzas del ejército sirio que se aglomeran en la zona rural de Lattakia, listos para dividir Idlib después de liberar a las numerosas aldeas que lo rodean.

Esto llevará al mundo a la próxima cita con un "ataque químico" en el próximo teatro de operaciones del ejército sirio y sus aliados. ¿Respaldaría Estados Unidos a al-Qaeda? Por qué no? Nunca se ha tratado realmente del uso de armas químicas, ya que Estados Unidos posee la mayor reserva de armas químicas del mundo: el verdadero problema es la derrota de los Estados Unidos ante el dominio de Rusia sobre el Levante.






Publicado por La Cuna del Sol
USA.