A sus 90 años, Don
Balvino Rodríguez se desempeña como Secretario General de la Unidad Revolucionaria
Nacional Guatemalteca (URGN) de Asunción Mita, Jutiapa, Guatemala. Es incluso
de mayor edad que Fidel Castro, con la diferencia que la revolución
guatemalteca no fue una revolución triunfante y por eso no se le conoce como
debiera justamente ser conocido. Es mayor en edad que Mujica de Uruguay y de mayor edad que
Marulanda fallecido hace algunos años en Colombia. Don Balvino es una persona
de ideales, no un idealista. Porque no es un iluso, ingenuo o inconsciente.
Sabe perfectamente lo que quiere: la construcción de una patria socialista para
vivir mejor y en paz. Cree en la unidad de las fuerzas progresistas y
democráticas, con la firmeza y la lealtad de sus convicciones.
DON BALVINO RODRÍGUEZ,
EL REVOLUCIONARIO
MÁS ANTIGUO DE AMÉRICA
LATINA
Por Luciano Castro Barillas
No es necesario buscar en otras latitudes
héroes revolucionarios. Aquí en Guatemala los tenemos. Son hombres humildes y
ejemplares que han sabido llevar su vida con dignidad, algo que cuesta en un
país como el nuestro desbordado por el oportunismo. Por la búsqueda
inescrupulosa del ascenso social, la conquista de la comodidad y la exhibición
de la opulencia. Toda una imitación de parte de las capas medias de la vida
ostentosa de los acaudalados. Por esto tanto narco, por eso tanto funcionarios
que no cumplen con su deber, por eso tanto partido político, por eso tanto
enredo donde las cosas podrían ser tan sencillas y descomplicadas. Por esos
tantos, tantos, que es difícil enumerarlos; es que Guatemala está en la
bancarrota.
Sin embargo, toda verdad es sencilla, toda
verdad es directa, toda verdad no tiene complicación; pero no nos confundamos,
una cosa es la simpleza y otra cosa es la sencillez. Eso es el compañero
Balvino Rodríguez, un hombre sencillo de grandes ideas, o quizá un hombre de
una sola idea a lo largo de sus 90 años: construir la democracia en Guatemala
y una patria socialista. Ese ideal, esa aspiración, le ha mantenido activo,
luchando a sus noventa años de edad. Sin flaquear, sin dar el piojito con este
u otro partido político. Él solo ha tenido un único partido; la Revolución
Guatemalteca. El nunca tuvo naipe de partidos políticos para jugar al póker de
las mañas. El solo tuvo un corazón consistente y una menta clara de pensar qué
es lo que necesita este país para salir adelante. Y en esa lucha se encuentra
hasta el día de hoy.
Es el Secretario General de URNG de Asunción
Mita. Es incluso de mayor edad que Fidel Castro, con la diferencia que la
revolución guatemalteca no fue una revolución triunfante y por eso no se le
conoce como debiera justamente ser conocido. Es mayor en edad que Mujica de Uruguay y de mayor edad que
Marulanda fallecido hace algunos años en Colombia. Ha dado tanto por la
sociedad y ha recibido tan poco en términos materiales, porque vive en la aldea
Estanzuela, de Asunción Mita, que le vio nacer un 15 de enero de 1925. Sigue
con la frescura de sus ideales políticos y sus principios que no se mueven como
el tronco de un roble centenario. Su natural inteligencia le hace ser amigo de
la paz, de la prudencia, del recato y hace uso de la palabra justa y
equilibrada a la hora de conversar, con el acento de una voz pausada, de un
hombre educado por la Revolución.
Don Balvino es una persona de ideales, no un idealista. Porque no es un iluso,
ingenuo o inconsciente. Sabe perfectamente lo que quiere: la construcción de
una patria socialista para vivir mejor y en paz. Cree en la unidad de las
fuerzas progresistas y democráticas, con la firmeza y la lealtad de sus
convicciones. Es un hombre con un
absoluto sentido del deber y responsabilidad ciudadana. Y está aquí, entre
nosotros, llegando al final de sus días,
con la frente erguida de dignidad política, sin andar de un partido a otro, sin
querer nada para él; sin esperar nada de nadie, porque hace apenas unos pocos
años dejó de labrar la tierra como todo un héroe del trabajo.
Don Balvino está aquí con nosotros y es preciso
seguir esos ejemplos de dignidad y cordura en este mundo de locos, en estos
tiempos del neoliberalismo, de esa
doctrina inhumana que tiene como último reducto en América Latina a tres países
nada más: Colombia, Guatemala y México. En los demás países esa doctrina se ha
escurrido o se está escurriendo ya por las tuberías de las aguas negras de la
historia.
Publicado por La Cuna del Sol
USA.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario