Los tres gobiernos del
Triángulo Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) asisten sin rechistar a las
citaciones, en el fondo van sus funcionarios con una sonrisa socarrona a
escuchar “las boberías gringas” para solucionar el problema migratorio de los
ciudadanos de esta región centroamericana.
KEVIN McALEENAN, OTRO
PATOSO FUNCIONARIO
DE SEGURIDAD DE LOS
ESTADOS UNIDOS
QUE NO VIENE A NADA A
GUATEMALA
Por Luciano Castro Barillas
Esta semana que está por finalizar se apareció
en Guatemala el secretario del Departamento de Seguridad Nacional de los
Estados Unidos, señor Kevin McAleenan, cargo ostentoso y que en el pasado,
cuando los Estados Unidos era una potencia mundial respetable, su presencia era
indicador que un designio imperial estaba en marcha. Ahora, pese a que todavía
los tres gobiernos del Triángulo Norte (Guatemala, El Salvador y Honduras)
asisten sin rechistar a las citaciones, en el fondo van sus funcionarios con
una sonrisa socarrona a escuchar “las bobería s gringas” para
solucionar el problema migratorio de los ciudadanos de esta región
centroamericana, en primer lugar, como promesa de campaña electoral de Trump.
Vinieron a dar instrucciones sobre el combate
al narcotráfico y la lucha contra la corrupción de las respectivas
administraciones nacionales, sobre todo con los presidentes de Honduras y
Guatemala cuya desvergüenza ya rebasó los límites inimaginables. Norma Torres,
la congresista de origen guatemalteco, no tardó en emitir declaraciones
condenatorias sobre esa modalidad de “democracia americana” que se colude
con trúhanes para acceder a acuerdos escandalosos y disparatados.
A Donald Trump en este tramo preelectoral las
cosas no le están saliendo como él se las había imaginado, y el chovinismo, ese
patrioterismo norteamericano, ya dejó de ser funcional. No pueden averiar más
el Acuerdo Nuclear con Irán, China le replica sin vacilación, aunque con
prudencia, a sus prácticas de terrorismo económico y la guerra de aranceles
tendrá una víctima inevitable si no se llega a un entendido, que son los
agricultores del Medio Oeste que generan una amplia base laboral, pero también
fueron sus votantes en las elecciones pasadas.
Trump no repara o no le importa que los grandes
importadores de soya y productos cárnicos sean los chinos, que pueden fácilmente sustituirlos con importaciones de
Brasil y la Argentina, además de la amplia oferta cárnica. Se traería abajo la
agroindustria estadounidense, sobre todo la carne de cerdo, que goza de un alto
consumo en el país asiático. Pero lo peor acaba de pasarle: Netanyahu no pudo
formar gobierno y Libermann le hace guiños a la izquierda israelí para
desmarcarse de la política fascista sin disimulo del reelecto premier, que
califica la decisión de traición.
Por ello lo de Guatemala, aunque menos
trascendente política y económicamente, es muy importante electoralmente, pues
los norteamericanos defraudados con lo del muro, por lo menos quieren
endurecimiento de las medidas contra los migrantes ilegales centroamericanos.
Se columbra, pues, todo un panorama negativo para los estadounidenses y sus
aliados, sin obviar las peticiones formales de congresistas de impulsar un juicio
político por el desastre al que lleva a los Estados Unidos esta persona que
sabe de negocios, pero no de política de Estado.
Publicado por La Cuna del Sol
No hay comentarios.:
Publicar un comentario