Guatemala desandaría lo poco
que ha podido caminar en los avatares aciagos y amenazantes de una paz estable
y duradera que no se puede edificar, pese al empeño de las diversas capas
sociales indomeñables contra la fatalidad que se les trata de imponer por una
oligarquía con esclerosis múltiple y nula capacidad de reacción política
positiva.
GUATEMALA ANTE EL INMINENTE
DESASTRE INSTITUCIONAL
Por Luciano Castro Barillas
La nueva junta directiva del Congreso que será electa el sábado 13 de enero
de 2018, con el tiempo en apremio y la ansiedad y desesperación de los
corruptos por mantener la vigencia de su obsceno pacto, ha movilizado a todas
las fuerzas oscuras, antidemocráticas y reaccionarias de este país para
continuar manteniendo y recuperando cómo no el viejo orden de destrucción
social y abandono político en que está sumido el país, en términos de gravedad,
en los últimos cinco años. Guatemala
desandaría lo poco que ha podido caminar en los avatares aciagos y amenazantes
de una paz estable y duradera que no se puede edificar, pese al empeño de las
diversas capas sociales indomeñables contra la fatalidad que se les trata de
imponer por una oligarquía con esclerosis múltiple y nula capacidad de reacción
política positiva, acompañados de acomodaticios personajes que les hacen
acompañamiento atroz en su obtuso empeño de conservar sus privilegios.
Esas esferas de delincuencia política y sus consecuencias negativas se ven
ampliadas y mejoradas cuando coludidas con la criminalidad común organizada con
gran músculo político por su incidencia en todos los procesos institucionales
tal sería, para el sábado, la "elección" del presidente del
Congreso. No hay de los candidatos más
divulgados, como el señor Álvaro Arzú Escobar (hijo del cuestionado alcalde
Álvaro Arzú Irigoyen) cuyo fin último es crear las condiciones políticas en el
Congreso para que el alcalde metropolitano durante casi veinte años no pierda
el derecho de antejuicio y sea procesado por ilícitos penales, como asociación
ilícita, malversación y peculado.
En la pestilente iniciativa de apañar la
corrupción y blindar la impunidad le acompaña un sujeto de gran empatía
con tiranuelos y corruptos, tal la figura de El Negro, Manuel Conde Orellana,
cuya misión es beneficiar al ejecutivo con sus cabildeos para ampliaciones
presupuestarias, promover iniciativas de ley para potenciar al sistema corrupto
y dejar sin la mínima dentadura a las reformas al Código Procesal Penal. Es
altamente pernicioso, pero es peor Álvaro Arzú Escobar, cuya misión prioritaria
es la defensa de las tropelías administrativas de su padre, para lo que cuenta
con el apoyo de las empresas, como tiendas de abarrotes, como los diputados del
Frente de Convergencia Nacional, FCN; Todos, Movimiento Reformador, MR; Alianza
Ciudadana, AC; y Partido de Avanzada Nacional, PAN; este último partiducho
grotesco creado por Álvaro Arzú Irigoyen; y los demás partiduchos sanitarios de
derechas altamente desacreditados.
Ya dijo Nineth Montenegro algo premonitorio
sobre la elección del sábado: "Es punto de inflexión, o avanzamos y
seguimos en la agenda en favor de la lucha contra la corrupción y la impunidad
o el retroceso será evidente. Al existir un retroceso, habrá una población que
va a reaccionar y puede ser el inicio del fin para el Congreso".
Publicado por La Cuna del Sol
USA.
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