En fin, los sionistas exigen al canciller Lavrov que se disculpe por haber ofendido a las víctimas del holocausto. Algo que el canciller no hará porque, sencillamente, no ha ofendido a nadie con lo declarado.
NO GUSTÓ A LOS
SIONISTAS
QUE DIJERA EL
CANCILLER RUSO, LAVROV,
QUE HASTA HITLER FUE
JUDÍO
Luciano Castro Barillas
Escritor y Analista Político
La Cuna del Sol
Hay asuntos que son baladíes, triviales, sin
embargo, no dejan de ser ciertos. Quizá no son verdaderos motivos para el
pleito para personas razonables, pero para sionistas y familia es una grave
ofensa por la cual exigen disculpas al canciller Lavrov. Son el caso típico de
palabras sacadas del contexto general para posicionarlas a ellas solas en el
lugar que políticamente les convenga. Así son los sionistas que se dicen
israelitas. Personas pícaras e intolerables que hacen de una pulga una vaca y que, no obstante, en países como
Guatemala las sectas evangélicas siguen viéndolos como “el pueblo elegido de
Dios”. En Jutiapa, por ejemplo, el actual alcalde de Quesada, nombró como
“Jerusalem” un espacio urbano del pequeño poblado con la presencia del
embajador. No sé qué les haya dado el embajador, pero me temo que nada, con lo
mezquinos que son esos individuos.
La historia de la Primera y la Segunda Guerra
Mundial da cuenta, explica las razones del rabioso y brutal antisemitismo del
canciller nazi, Adolfo Hitler, que llevó muy seguramente al holocausto a 6
millones de judíos. No se puede escamotear la cifra, pues aún hayan sido solo
100 mil personas las sacrificadas injustamente, el hecho es todo un horror
escalofriante, que no es fácilmente asimilable. Imagínese, usted, lector amigo
¡seis millones de personas!
Esa declaración de Lavrov fue para salirle al
paso a un asunto de tipo político-militar en cuanto a la operación militar
especial de Rusia en Ucrania respecto a la desnazificación
de Ucrania. Los negacionistas del nazismo en Ucrania, cuyos batallones fanáticos
siguen irreductibles en la siderúrgica de Azovstal, son una muestra de lo
afirmado por el canciller ruso. Independiente de los orígenes judíos del
presidente Zelensky, ello no obsta de que su régimen sea de extrema derecha.
¿Acaso no fueron los mismos judíos en el gueto de Varsovia durante la Segunda
Guerra Mundial carceleros y verdugos? Por favor, no den señores sionistas tanta
importancia a un asunto baladí. Pero como son excusas para unirse al grupo de
países “no amistosos” con la Federación Rusa, de algo había que agarrarse y que
mejor que medie una “ofensa” rusa contra el pueblo judío.
El origen judío de Hitler fue siempre en
Alemania un secreto a voces, fruto de una relación incestuosa entre un tío y
una sobrina, lo cual dio un engendro verdaderamente loco como lo fue Adolfo
Hitler. El canciller alemán vivió siempre atormentado por ese no tan lejano
ancestro (un abuelo paterno). Ante esa inquietud, zozobra y miedo, giró
instrucciones a su abogado Hans Frank,
para que investigara su origen. En efecto, era así, y el señor Frank para pagar
su silencio fue premiado por el canciller nazi, como Gobernador General de
Polonia donde se enriqueció matando y robando judíos. Gran fortuna que de nada
le sirvió porque, al final del conflicto, fue enjuiciado en el Tribunal de
Nüremberg y ahorcado con senda soga el 16 de octubre 1946.
En fin, los sionistas exigen al canciller Lavrov que se disculpe por haber ofendido a las víctimas del holocausto. Algo que el canciller no hará porque, sencillamente, no ha ofendido a nadie con lo declarado. Lo que sí está pasando en Israel y que lo ven con gran celo e ira, es que los norteamericanos están gastando mucha plata en ayuda militar a Ucrania y no quieren que a ellos les escamoteen la ayuda militar de siempre para mantener en conflicto la zona del Medio Oriente.
Publicado por La Cuna del Sol
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