El enfriamiento de las
relaciones entre estas dos grandes potencias, Estados Unidos y Rusia, debido a
las diferencias sobre Siria se has profundizado en las últimas semanas. Una vez
dicho esto, cualquier observador experimentado sabe que las apariencias pueden
ser muy engañosas cuando se trata del impase entre Estados Unidos y Rusia.
Pronosticar sobre las relaciones ruso-estadounidenses resulta complicado, y no
hay que precipitarse en hacer juicios. Sin embargo, hay indicios intrigantes
que Washington y Moscú están caminando de puntillas uno alrededor del otro, sin
interactuar directamente, tal vez, pero no sin el contacto visual, por otra
parte.
LOS EE.UU Y RUSIA SE
COMUNICAN
A PESAR DE LA
PUGNA EN SIRIA
Por M.K Bhadrakumar
El enfrentamiento ruso-estadounidense sobre Siria tomó un nuevo giro con
una advertencia bastante explícita por parte de Moscú de que cualquier ataque
con misiles estadounidense sobre Siria será contrarrestado por el sistema de
defensa aérea de Rusia. El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, el general Igor
Konashenko dijo en Moscú que, cualquier ataque aéreo o con misiles representara
una clara amenaza a las fuerzas rusas desplegadas en Siria, dejando no otra
opción al sistema de defensa aérea de Rusia que reaccionar.
El general también manifestó que Rusia ha tomado las medidas necesarias para
garantizar que los EE.UU. y sus aliados occidentales no puedan repetir los
casos anteriores de ataques aéreos sobre las bases de Siria, que Washington
había explicado como accidente.
El general Konashenko ha emitido una advertencia a los EE.UU de no quejarse
si sus misiles son derribados. "El personal de turno no tendrá ni siquiera
tiempo para calcular la trayectoria de vuelo de los misiles o tratar de
averiguar su nacionalidad". También criticó a los analistas militares
estadounidenses que presumen de la aeronave sigilosa, declarando que "todas
las ilusiones de los aficionados sobre la existencia de aviones
"invisibles" se enfrentarán a una realidad decepcionante”.
En otra declaración contundente, el general ruso dio a entender que la gama
de las versiones avanzadas de los sistemas de misiles S-300 y S-400 desplegados
en Siria tomará por "sorpresa" los estadounidenses. No dio más
detalles. (RT)
La causa inmediata de las observaciones anteriores podrían ser los informes
que aparecen en los medios de comunicación de los Estados Unidos de que hay una
escuela de pensamiento en Washington que promueve la degradación las fuerzas
del gobierno sirio a través de ataques de misiles crucero y con ello alterar el
equilibrio militar a favor de los grupos rebeldes. Por supuesto, es el
presidente Barack Obama, que tomará la decisión final. (Washington Post)
En mi opinión, sin embargo, la probabilidad que Obama ordene la
intervención militar en Siria es bastante remota -a pesar de que la caída de
Alepo es una píldora difícil de tragar, ya que los EE.UU no sólo pierde
credibilidad en todo el Oriente Medio, sino que también será visto como una
potencia en retirada, lo que sería un hito histórico en la historia de la
hegemonía occidental en la región.
En vista de ello, el enfriamiento de las relaciones entre estas dos grandes
potencias, Estados Unidos y Rusia, debido a las diferencias sobre Siria se has
profundizado en las últimas semanas. Una vez dicho esto, cualquier observador experimentado
sabe que las apariencias pueden ser muy engañosas cuando se trata del impase
entre Estados Unidos y Rusia. Pronosticar sobre las relaciones
ruso-estadounidenses resulta complicado, y no hay que precipitarse en hacer juicios.
Sin embargo, hay indicios intrigantes que Washington y Moscú están caminando de
puntillas uno alrededor del otro, sin interactuar directamente, tal vez, pero
no sin el contacto visual, por otra parte
De este modo, la Casa Blanca ha minimizado la decisión de Rusia de
retirarse del pacto de seguridad nuclear con Estados Unidos, que es un legado
de la presidencia de Barack Obama. (Reuters) La Casa Blanca dijo que la
cooperación con Rusia en el ámbito de la seguridad nuclear es todavía posible.
Una vez más, a pesar del anuncio de Estados Unidos el lunes en relación a
la suspensión de las conversaciones con Rusia sobre Siria, la subsecretaria de
Estado para Asuntos de Eurasia, Victoria Nuland, viajó a Moscú el martes como
estaba previsto con anterioridad. Aparentemente, su misión era a cerca de Ucrania, pero siendo la diplomática
de carrera de más alto rango en tratar
con Rusia en el Departamento de Estado, es del todo concebible que ella tuvo la
oportunidad de tener algunos intercambios de amplio alcance con sus homólogos
rusos. Nuland habló sobre todo con el ayudante del Kremlin Vladislav Surkov,
que es cercano al presidente Vladimir Putin.
Aunque Nuland no es particularmente del agrado de Moscú -su marido es el
famoso comentarista neoconservador Robert Kagan- el lenguaje corporal de su
visita parece muy bien en las difíciles condiciones imperantes. El portavoz del
Kremlin, Dmitry Peskov, comentó que las conversaciones de Nuland revelaron
"un creciente entendimiento" sobre la necesidad de seguir adelante
con la aplicación de los acuerdos de Minsk. (El sesgo de Peskov fue que
"ningún progreso se puede esperar" de las conversaciones de Nuland.)
Al mismo tiempo, es obvio que la reciente visita no programada del canciller
francés, Jean-Marc Ayrault a Moscú está centrada casi en su totalidad en Siria –la
batalla de Alepo, en particular. Francia había introducido una dura resolución en
Rusia en el Consejo de Seguridad de la ONU hace unos días ocasionado algunos intercambios
subidos de tono con la parte rusa. Pero mientras hablaba con la prensa en Moscú,
sonaba conciliador. (TASS)
Jean-Marc Ayrault estara viajando a Washington desde Moscú. Francia aspira
a encabezar una iniciativa independiente de las deliberaciones de Estados
Unidos y Rusia sobre Siria, lo cual es por supuesto tradicional a la
trayectoria independiente de la diplomacia francesa en las relaciones
"Este-Oeste", incluso durante la época de la Guerra Fría. No
obstante, el papel de Francia se vuelve significativo porque el presidente
Vladimir Putin tiene previsto visitar París el 19 de octubre.
En el análisis final, sin embargo, es el curso de la batalla de Alepo que
marcará el ritmo de todo el trabajo diplomático actual -no al revés. Parece
improbable que Moscú cometa de nuevo el error de acordar un alto el fuego que
podría ser utilizado por los grupos de Al-Qaeda para traer refuerzos y
reagruparse. La prioridad de Rusia debería ser completar lo antes posible la
campaña de Alepo y, posteriormente, de inmediato reavivar las conversaciones de
paz.
Los recientes informes iraníes destacan que los aviones rusos están llevando
a cabo numerosos ataques en diferentes partes de Alepo y feroces enfrentamientos
se están llevando a cabo en las localidades del noreste de la ciudad. (FARS)
Publicado por La Cuna del Sol
USA.
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